“Las consecuencias de la inflación afectan a la pobreza, el nivel de trabajo, la competitividad, las inversiones y el crédito”, expresó el vicepresidente de la Nación y titular del Senado, Julio Cobos, que aseguró que “si no hay reglas de juego claras y certidumbres en el país, no habrá inversiones”.

Cobos opinó sobre la inflación durante las Jornadas “La Argentina que queremos”, que se realizaron este jueves en un hotel céntrico de Buenos Aires. Allí, el funcionario mendocino manifestó que si se logran “determinar bien las causas de la inflación”, se sabrá “cómo enfrentarla”.

El titular de la Cámara alta explicó: “Hay dos aspectos que tenemos que tener en cuenta, primero las expectativas. Si no hay un organismo que fehacientemente nos diga cuál es el valor de la inflación, vamos a seguir moviéndonos con la sensación de lo que vemos cuando vamos al supermercado. Entonces necesitamos certidumbre. Ojalá que se recupere el INDEC como se venía trabajando en 2006, era un buen modelo y con personas capacitadas. Si hay algún índice que está dando más de lo que se espera, esto no se soluciona escondiéndolo, sino corrigiéndolo”.

Cobos sostuvo que, en segundo lugar, está “la relación entre la oferta y la demanda”, y sugirió “seguir incentivando, a través de la política de consumo y de inversión, pero orientada a generar competitividad en la economía, para atender el problema social seriamente”.

Finalmente, el vicepresidente de la Nación pidió “fijar metas”, y detalló: “Si la inflación hoy es del 20 o 22 por ciento, apuntemos a que el año próximo lleguemos al 15 o 13 por ciento, pero orientado a la producción, a la relación importación y exportación, ir controlando el gasto y reorientándolo con una política monetaria que acompañe, y con un tipo de cambio adecuado. Lo que he querido resaltar son las consecuencias que la gente no las observa, pero son las que nos preocupan para el futuro”.