Legisladores de Unión Celeste y Blanco cuestionaron la utilización que se le está dando tanto a los miembros policiales, como a los penitenciarios y pidieron un plan de reestructuración.
El bloque de diputados bonaerenses de Unión Celeste y Blanco apuntó sus críticas a la política de seguridad del gobernador Daniel Scioli y reclamó que los policías y penitenciarios regresen a sus lugares de origen a brindar seguridad. “Scioli tiene a la policía haciendo dedo en la ruta, en lugar de remunerarlos bien y ponerlos a perseguir delincuentes”, se indicó.
“Es indigno e intolerable que funcionarios valiosos, como los policías, estén varados en las rutas pidiendo con el dedo que alguien los lleve a su trabajo; eso jamás pasará en el gobierno de De Narváez”, dijo el jefe de la bancada, Ramiro Gutiérrez.
“Debemos contar con una policía activa, con un sueldos acordes que garanticen cubrir todos los gastos de los efectivos. No podemos seguir viendo agentes tirados en las rutas, o penitenciarios en las estaciones de micros intentando viajar a penales que quedan en la otra punta de la Provincia”, explicó el legislador.
Guitiérrez presentó un proyecto para solicitar al gobierno provincial la puesta en marcha de un Plan de Reestructuración de Personal que permita en sesenta días la readecuación de destinos de policías que actualmente cumplen funciones en los distritos del conurbano.
“Scioli prometió que los agentes que egresen conservarían sus destinos de origen, por supuesto no ha cumplido y ya es tiempo que accedan a ese derecho, para luego y en forma gradual ampliarlo a toda la fuerza”, concluyó.
Por otra parte, y en relación al proyecto de inversión de 20 millones de pesos en la construcción de comisarías y patrulleros para el partido de La Matanza, la diputada y vicepresidente del bloque denarvaísta, Mónica López, resaltó: “Las inversiones que Scioli desea realizar en los municipios bonaerenses son sólo un cuentagotas para las necesidades reales que tiene la gente”.
López sostuvo que la política de seguridad de Scioli “es un fracaso; evidentemente el reclamo de los lugareños no está en su agenda del día”.
“La provincia de Buenos Aires a Scioli le queda demasiado grande, nosotros visitamos La Matanza con Francisco de Narváez, en varias oportunidades y sus habitantes están desesperados y viven con miedo, desde hace más de 20 años. La gente de los barrios carecientes es la que más sufre la inseguridad”, dijo la diputada.
