Candidato presidencial por Compromiso Federal, el gobernador Alberto Rodríguez Saá conforma una fórmula junto al ex mandatario santafesino José María Vernet. En su propuesta para el país, propone seguridad, pleno empleo, educación, salud y muchas, muchas viviendas. Asegura que no son sólo ideas: ya lo hizo en San Luis.
Por Agustín Alvarez Parisi
Exactamente una semana después de la realización de las elecciones primarias, abiertas y simultáneas, Alberto Rodríguez Saá cumplirá 62 años. Espera festejarlo con un resultado auspicioso en esa instancia que él mismo define como “la gran encuesta nacional”, donde entre los candidatos va a saberse “quien es quien”, de cara a las presidenciales que el gobernador puntano intenta protagonizar.
Rodríguez Saá transita los últimos meses de su segundo mandato al frente de San Luis, experiencia que se propone extender al resto del país y que le sirve como carta de presentación: es, remarca, la garantía de que lo que propone lo ha hecho.
– ¿Por qué quiere ser presidente de la Nación?
– Porque en San Luis he logrado muchísimas cosas, se cómo se hace un atajo al futuro, cómo lograr pleno empleo, cómo construir viviendas, cómo darle seguridad a los ciudadanos y sobre todo como unir a los argentinos. Esto me entusiasma y me parece sumamente interesante ofrecérselo a la Argentina y darle la garantía al ciudadano de que lo que digo lo he hecho.
– El 14 de agosto son las elecciones primarias. ¿Ese día se define quien será el candidato del Peronismo disidente?
– El 14 de agosto es una experiencia única, es la primera vez que en nuestro país se va a realizar una elección primaria abierta entre todos los partidos políticos. Yo estaba en contra de esta ley, pero ya es la ley. Así que sin cuestionarla digo que es una jornada muy importante, porque va ser el día de la gran encuesta nacional donde vamos a saber los argentinos quien es quien; quien tiene los votos y quien no los tiene. Lo interesante de esta encuesta es que el ochenta por ciento de la población quiere algo distinto que consiste en más seguridad, pleno empleo, vivienda. Por eso digo si me conocen sé que me van a votar el 14 de agosto, por eso reitero que es muy importante.
– ¿No cree qué usted va a competir en un mismo espacio con Duhalde?
– No, con Duhalde intentamos una interna que se vio frustrada porque él la abandonó. Correspondería que él me diera la mano, como lo hizo cuando empatamos en la Capital Federal y en Entre Ríos.
– ¿Qué pasó después?
– Duhalde se baja del espacio y de la interna, entonces corresponde que él me dé la mano y reconozca esto. Por lo tanto no hay ninguna disputa con Duhalde, porque ya se hizo la interna.
– ¿Entonces no hay más Peronismo Federal?
– No, el Peronismo Federal lo represento yo, en lo que es Compromiso Federal, porque no nos podemos llamar peronismo. Repito: ya se hizo la interna y ahora hay que mirar para adelante.
– Usted dice que ganarle a Cristina es más fácil que ganarle a Duhalde.
¿Por qué está tan seguro?
– Yo digo que primero había que ganarle a Duhalde, ya lo logramos y ahora vamos a ganarle a Cristina.
– ¿Cómo?
– Para ganarle a Cristina, primero hay que pasar por el 14 de agosto, donde vamos a ver esa radiografía en esa encuesta. Cuando la gente vea el resultado, estoy convencido de que a partir de entonces va a haber una discusión de ideas. Mis ideas son muy sólidas e interesantes, pero además tienen el aval de que todo lo que digo ya lo hice en la provincia de San Luis. Todo esto me dará un aval muy importante para ganarle a Cristina. Que hoy no es ganarle a Cristina o ganarle a Duhalde, porque sería como hablar de oposición y oficialismo, no, yo creo que puedo lograr algo superador que es ser una alternativa en la Argentina para lograr un futuro mejor.
– Sin embargo las encuestas dicen que la presidenta hasta puede ganar en primera vuelta el 23 de octubre…
– Sí, algunas encuestas dicen realmente eso, pero también las encuestas dicen que un ochenta por ciento quiere otra cosa… Y bueno, yo soy otra cosa.
– ¿Confía en que puede llegar a competir en una segunda vuelta?
– Sí, en una segunda vuelta con Cristina y con muchas posibilidades de triunfar, porque ese momento ya va a ser el de la discusión de los programas y de las ideas y los liderazgos. Este es el gran desafío y es parte de la democracia, porque la democracia es llegar con un mensaje al electorado y ofrecerle un liderazgo. Y esta es la oportunidad que da la democracia y las elecciones. Esto todavía no ha empezado y aparece esto que se dice “ganó Cristina”, o que ella está mejor posicionada… Tenemos que esperar a que comience el procedimiento democrático.
– ¿Cuáles serán sus principales propuestas?
– Seguridad, como en San Luis; pleno empleo, educación, salud, viviendas, viviendas, viviendas… Lo digo tres veces porque es una necesidad de todos los sectores sociales. La vivienda es la familia unida, participando, es un centro de unión. Estos son los grandes desafíos, pero mucho más que eso es unir a la Argentina, esta es la gran cuestión. Por eso este ofrecimiento que parece extraño de que Adolfo (Rodríguez Saá) participe como candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires por nuestro espacio.
– ¿Realmente esta candidatura de su hermano en la provincia de Buenos Aires no le parece extraño?
– Sí, parece extraño, pero Adolfo es el único dirigente que es capaz de unir al peronismo de Buenos Aires, y este reflejo va ser necesario para unir a la Argentina.
– ¿Cómo se explica que Adolfo Rodríguez Saá vive en San Luis y va como candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires?
– Adolfo vive en la Ciudad de Buenos Aires hace mucho tiempo, porque es senador nacional y ha vivido cuando era estudiante. Ha vivido durante mucho tiempo en la provincia de Buenos Aires, más del tiempo requerido por la Constitución. Conoce los problemas de la Provincia más que nadie; ha sido, aunque por unos días, presidente de la Nación, así que es conocedor de los problemas de la provincia de Buenos Aires. Los que reclamaron su presencia fueron la militancia y los dirigentes del peronismo bonaerense, que le dijeron: “Adolfo, no hay un candidato peronista en la provincia de Buenos Aires”. Y es cierto, si uno se pone a repasar, encuentra que lo de (Francisco) De Narváez termina siendo una aventura, porque él se presenta en Buenos Aires, se va a la Nación, compra la Biblioteca de Perón, se entusiasma con el peronismo… Ahora compró el traje de (Ricardo) Alfonsín y se va con Alfonsín, no resulta un candidato peronista serio ni de tradición.
– ¿Scioli no es peronista?
– Scioli es un espectacular y muy serio delegado del Frente para la Victoria en la provincia de Buenos Aires, pero no es un hombre que simbolice nada desde el punto de vista del peronismo. Las tradiciones y la vocación del peronismo por la justicia social, por la unidad y por mirar de otra manera a la Argentina están representada en Adolfo.
– ¿Por qué eligió a José María Vernet como compañero de fórmula?
– Por su larguísima trayectoria, porque es muy buena persona, muy buen padre de familia, muy buen amigo de los amigos y una persona incondicional de los principios del peronismo. A Vernet hoy se lo recuerda como gobernador de Santa Fe, con una excelente gestión, por todo esto nos parece un compañero ideal para este momento histórico de nuestro país.
– ¿A su criterio cuáles son las principales falencias que ha tenido en estos ocho años la administración kirchnerista?
– Simbólicamente lo vamos a poner en varias áreas. Como jefe de Gobierno, jefe de Gabinete, o principal ministro de la Vivienda por ejemplo a (Sergio) Schoklender. Estoy diciendo simbólicamente, porque Schoklender fue el que instrumentó el plan de viviendas de Cristina, y esto ha sido un error enorme. Y tiene varios Schoklender todavía en el Gobierno y estos son los errores. Ella abrazó un capitalismo de amigos que no funciona en el mundo, porque no tiene ningún objetivo más que favorecer a los amigos, y esto es un gran error.
– ¿Qué aciertos rescata de este gobierno?
– Los aciertos pueden ser la Asignación Universal por Hijo, y en los momentos difíciles haber tomado decisiones; esa firmeza también es necesaria en un Gobierno. De todas maneras, de buena persona un dirigente debe decir así: vamos a continuar con todo lo bueno que ha hecho el Gobierno, porque seguramente cuando lleguemos a la presidencia vamos a descubrir algo que no hemos visto dentro de las pasiones de hoy en día. Es decir, vamos a continuar con todo lo bueno y vamos a rectificar lo que esté mal.
– Si llegara a la presidencia de la Nación, ¿cuáles serían las primeras medidas que tomaría?
– Me bajaría del estrado cuando jure la presidencia en el Congreso, y le daría la mano a todos los ex presidentes, a los jefes de las bancadas opositoras y a los que han sido candidatos opositores. Los voy a invitar a todos para darles la mano, será la primera vez en la historia argentina que se le extiende la mano al adversario, de una manera concreta y con un gesto muy fuerte.
– ¿Los va a invitar a todos?
– Sí, al doctor Menem, a De la Rúa, a la señora María Estela Martínez de Perón, y a los que han sido candidatos como Carrió, Alfonsín, Altamira, a la señora Cristina Fernández de Kirchner.
– Pero en ese caso ella le va a poner la banda…
– Me va a poner la banda, pero le voy a extender la mano, que es un gesto muy importante, esta es la manera de aprovechar la energía de la Argentina para mirar al futuro. El Ejecutivo debe mirar al futuro, el Parlamento mira el presente y el Poder Judicial mira para atrás.
