Las discrepancias en el seno del radicalismo porteño se trasladaron a las primarias, donde la UCR Capital se resiste a la adhesión de la lista narvaísta para la candidatura de Ricardo Alfonsín. Así las cosas y a menos que la Justicia Electoral termine convalidando lo contrario, la nómina que encabezan Pablo Lanusse y Fanny Mandelbaum […]
Las discrepancias en el seno del radicalismo porteño se trasladaron a las primarias, donde la UCR Capital se resiste a la adhesión de la lista narvaísta para la candidatura de Ricardo Alfonsín. Así las cosas y a menos que la Justicia Electoral termine convalidando lo contrario, la nómina que encabezan Pablo Lanusse y Fanny Mandelbaum será “corta”, lo cual hasta hace peligrar que traspase las primarias y pueda competir en octubre. Para eso, necesitan al menos unos 28.000 votos, lo cual no es poca cosa.
En las filas de Francisco de Narváez las facturas se la pasan a Enrique Coty Nosiglia, con quien el día del cierre de listas para las elecciones porteñas se acordó “bajar” la lista propia y dejar de lado las negociaciones que ya estaban casi cerradas con Ricardo López Murphy, apoyando en cambio la candidatura de Silvana Giudici. Como contrapartida, se habría acordado armar una lista conjunta para diputados nacionales. Pero el viernes previo al cierre de listas para las primarias, el Coty cambió de parecer y no sólo no se armó una única lista, sino que no se les permitió a los narvaístas adherir para las primarias a la candidatura presidencial de Alfonsín.