Un grupo de trabajadores del Congreso de la Nación, concurrió a una visita guiada al Espacio de la Memoria, ubicado en la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).

Convocados por la Comisión de Derechos Humanos de la Asociación del Personal Legisltivo (APL), que conduce Norberto Di Próspero, asistieron a la recorrida por el predio de 17 hectáreas que guarda el triste privilegio de ser el primer centro clandestino de detención y que a su vez abrió el camino al genocidio producido a partir de 1976 y que se multiplicó en centros de detención en todo el país.

A lo largo del recorrido, que se extendió por tres horas, los visitantes entre los que estaba una nutrida delegación de trabajadores de la Imprenta del Congreso de la Nación, intercambiaron opiniones y experiencias con el guía del lugar, Hernán Scappattore, quien desde la llegada al lugar invitó a hacer un “ejercicio de memoria” entre todos.

Ingresando al siniestro Casino de Oficiales que funcionaba como centro de operaciones, llegaron al sótano, usado en aquellos tiempos como lugar de tortura y paso previo a los llamados vuelos de la muerte. En el tercer piso pudieron ver que a modo de altillo, se ubicaba “capucha” el lugar que funcionaba como prisión en condiciones de hacinamiento, y también las pequeñas habitaciones en donde las embarazadas tenían a los bebés que luego fueron apropiados por los genocidas. De 35 partos producidos en la
ESMA, sólo 11 jóvenes nacidos allí recuperaron su identidad.

Además, se pudo ver en la Escuela propiamente dicha, una muestra fotográfica hecha por un sobreviviente, Víctor Basterra.