La líder de la Coalición Cívica no quiere convalidar “ninguna separación injusta” de su bancada, pero confirmó ante sus pares que se mantendrá alejada de las decisiones en su partido.
La diputada Elisa Carrió convocó a los legisladores de la Coalición Cívica a su departamento de Barrio Norte, en el que confirmó que no piensa presidir el bloque a partir del 10 de diciembre, cargo que ostentará muy posiblemente el diputado Alfonso Prat-Gay.
Carrió reaparecerá públicamente el sábado en un acto a realizarse en San Nicolás, pero confirmó ante los legisladores de su partido que no va a meterse ni opinar sobre las decisiones que adopte la conducción de su partido, a cargo ahora de Adrián Pérez.
No obstante ello, Carrió no está muy de acuerdo con la separación de Patricia Bullrich, y según pudo saberse expresó que no convalidará “ninguna separación injusta”. Recordemos que Carrió mantiene una buena relación con la líder de Unión por Todos, quien a su vez aclaró que no piensa renunciar al bloque, que con su salida y la casi segura de Hilma Re, quedará reducido a cinco integrantes.
Según expresó a radio El Mundo la senadora María Eugenia Estenssoro, los legisladores se reunieron con su líder, en el marco de un encuentro que definió como “bueno”, y contó que “ella ratificó de que quería dar un paso al costado y dejar que dirigentes más jóvenes se hagan cargo del partido, su recuperación y futuro y que ella va a estar más en un movimiento más cívico donde tenga más libertad para decir las cosas que quiere y no tener la obligación de juntar los votos”.
“El fracaso electoral que tuvimos este año, no es solamente responsabilidad de Carrió sino de la debilidad de una estructura partidaria que no se llegó a consolidar. El desafío es grande”, señaló Estenssoro.
