Desde las 13.34, el pleno de la Cámara baja se reúne para tratar la ley de leyes y un paquete de proyecto de índole económica que pidió la presidenta de la Nación. Entre otros, también se tratan las prórrogas a la emergencia económica, y la modificación al la ley de impuesto a las ganancias.
La Cámara de Diputados se reúne en el recinto en el marco de las sesiones extraordinarias convocadas por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Desde las 13.34 y con la presencia de 177 diputados –para muchos de ellos es su primera sesión-, el pleno de la Cámara baja se dispone a tratar el Presupuesto 2012.
El pleno de la Cámara baja pondrá a consideración un dictamen de mayoría del kirchnerismo, y otros cinco de minoría pertenecientes al Pro, el FAP, el Frente Peronista, la UCR y la CC-ARI respectivamente.
Además el oficialismo busca aprobar las prórrogas a la emergencia económica y a los impuestos al cheque y a los cigarrillos, y a la exportación de hidrocarburos. También se tratará sobre tablas un proyecto que faculta al Poder Ejecutivo a fijar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias y la ratificación de ese tope implementado por resoluciones de la AFIP durante 2010 y 2011.
Según lo acordado en la reunión de la Comisión de Labor realizada este miércoles por la mañana, los bloques acordaron comenzar con el tratamiento del Presupuesto 2012 y fijaron que habrá un orador por fuerza. El jueves la sesión continuaría con el tratamiento de los dos proyectos contra el lavado de dinero y con la modificación al Régimen Penal Tributario y el viernes se tratarían los proyectos denominados Ley de Tierras, Ley de papel para diarios y Estatuto del Peón Rural.
Al inicio de la sesión, el titular de la Comisión de Presupuesto, Roberto Feletti, expuso los fundamentos del Presupuesto 2012. Según el ex viceministro de economía “constituye una ratificación de una política fiscal que se ha evidenciado como exitosa a lo largo de todos estos años pero a partir principalmente de la crisis de 2008”.
Entre otras características, Feletti dijo que el Presupuesto contempla una “tendencia de la recaudación es a la progresividad”; se basa en la fuerte presencia del Estado en la economía; y en un “mayor grado de federalismo” y coparticipación. Finalmente, el economista pidió a sus pares la aprobación del resto de proyectos de índole financiera que permitirá al Gobierno afrontar la crisis económica.
Miguel Giubergia fue el orador del radicalismo. El reelecto vicepresidente de la Comisión de Presupuesto lamentó el tratamiento en conjunto y en poco tiempo de todas las iniciativas y dijo: “¿Cómo se puede discutir seriamente si el índice de inflación utilizado por el Gobierno no refleja la realidad?”.
En cuanto a las prórrogas a los impuestos al cheque y a los cigarrillos, el diputado dijo que su bloque votará por su dictamen que, a diferencia de oficialismo, “defiende las provincias”. Por su parte, su compañero Jorge Álvarez repudió al “debate express” que impuso el Frente para la Victoria. “No hay derechos a tratar temas tan importantes como el presupuesto con tanta urgencia”, dijo el diputado, tras recordar que su bloque había solicitado la exposición del secretario de Obras Públicas.
El diputado denunció que con estos proyectos “se siguen delegando facultades al Poder Ejecutivo y quitándole fondos a las provincias”. Atilio Benedetti (UCR), por su parte, planteó “la inconveniencia” de la prórroga del impuesto a cheque.
Por parte del Frente Peronista, Eduardo Amadeo anticipó que su fuerza no acompañará el Presupuesto del Gobierno y la prorrogación de la ley de emergencia económica por tres razones: por “la política de conflicto” que lleva a cabo el oficialismo al “imponer” el debate; por la violación de la ley de fondo anticíclico y otras normas y las “inconsistencias macroeconómicas”; y por la redistribución de los fondos entre las provincias.
Luego, el puntano Alberto Pérez (FP) adelantó el voto a favor de la prórroga del impuesto al cheque pero pidió que la coparticipación se eleve del 30 por ciento actual al 100 por ciento.
Claudio Lozano, del Frente Amplio Progresista, adelantó que su interbloque rechazará el Presupuesto del Poder Ejecutivo por dos razones: la primera de “de orden conceptual si bien compartimos la presencia del Estado”; y porque “por el dibujo de los números presentados hacen que el debate se casi una ficción institucional”. Por su parte, adelantó el apoyo a las prórrogas a los impuestos al cheque y cigarrillos porque consideró que “no hay que desfinanciar al Estado nacional” y anticipó el voto afirmativo a la prórroga a la exportación de hidrocarburos.
Por otro lado, rechazó la prórroga a la emergencia económica por considerar que no hay tal situación y adelantó la abstención de su fuerza a la modificación al impuesto a las ganancias por haberse introducido “por la ventana” y porque delegar al Gobierno una facultad del Congreso.
En nombre del Pro, Jorge Triaca aseguró que el Presupuesto del Gobierno “no refleja la realidad” y que la modificación al impuesto a las ganancias que propone el oficialismo “va en contra de los trabajadores”. El igual que sus precedentes, rechazó el proyecto para facultar al Poder Ejecutivo a incrementar los montos previstos en la ley de impuesto a las ganancias.
El diputado Alfonso Prat Gay (CC-ARI) adelantó el rechazo de su bloque a la prórroga de la emergencia económica que propone el Gobierno por entender que “es incongruente e incompatible con el relato oficial” y defendió su dictamen de minoría. En cuento al impuesto al cheque, el diputado
Los números del Presupuesto
El proyecto de Presupuesto 2012 prevé una pauta de crecimiento del 5,1 por ciento, una variación anual del índice de Precios al Consumidor del 9,2 por ciento, una cotización promedio del dólar de 4,40 pesos y el uso de 5.674 millones de dólares de reservas para el pago de deuda.
Además, estima exportaciones por 90.833 millones de dólares e importaciones por 82.254 millones de dólares, con un superávit en la balanza comercial de 8.579 millones de dólares, entre otras cuestiones.
La recaudación de impuestos nacionales y de contribuciones a la seguridad social se estima en 668.290,5 millones de pesos, un 23,2 por ciento mayor a 2011.
