Por Pablo Riveros

Hasta hace unos meses el nombre de Ramona Pucheta no trascendía más allá de la agrupación que tiene como máximo referente a Raúl Castells. Se dedicaba de lleno a la coordinación nacional del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados hasta que, fruto de su acuerdo con Alberto Rodríguez Saá, el 5,59 por ciento de los votos bonaerenses la consagraron diputada de la Nación. Pucheta comenzó a estar en boca de varios cuando afirmó que le cedería su banca al líder piquetero, quien había sido relegado al tercer puesto de la lista electoral por decisión de la Cámara Electoral. De inmediato una decena de diputadas del oficialismo y de la oposición se unieron para denunciar la violación del Cupo Femenino y anticiparon que impugnarían la asunción de Castells.

Pero finalmente, el 6 de diciembre el MIJD vio jurar a la primera compañera elegida democráticamente como representante en el Congreso de la Nación. Semanario Parlamentario dialogó con la flamante diputada del monobloque Socialistas del MIJD acerca de su polémica asunción y de sus primeras decisiones como legisladora nacional y como integrante del interbloque Frente Peronista.

– El MIJD vivió un episodio muy polémico cuando Raúl Castells se dispuso a asumir la banca que usted finalmente ocupa. ¿Cómo se resolvió esta cuestión? ¿Cómo vivió usted ese momento?

– Nosotros como organización social y política desde el momento en que hemos decidido ir a elecciones conjuntamente con Alberto Rodríguez Saá hemos tomado la decisión de que en caso de no poder llegar al porcentaje para que pueda asumir Castells, automáticamente Ramona se hacía de lado para que pueda estar Raúl. ¿Por qué digo si no teníamos el porcentaje? Porque como ya hemos participado en otras elecciones y no hemos alcanzado el número de votos que necesitábamos. Esto ya se había hablado de antemano y estaba de acuerdo. Cuando Raúl no pudo acceder a la banca porque estaba tercero, yo salgo a decir que le cedía el lugar. Eso trajo toda la polémica donde decían que estábamos violando el Cupo Femenino. Pero siempre dije que en ningún momento se lo quiso violar y de hecho somos una organización, donde el 80 por ciento somos mujeres, así que justamente mandamos más las mujeres que los hombres. Luego de realizar elecciones internas, casi el 60 por ciento decidió que asumiera Castells, pero como siguieron argumentando que él no podía estar entonces asumí. Quiero que quede bien claro que no hubo un apriete, como muchos oficialistas y demás están pensando, ni que por ser una mujer querían sacarme el lugar, o porque soy una campesina. Para nada. Yo vengo militando hace 11 años en el área social y siempre en mi partido estas decisiones se tomaron en asamblea, según lo que diga la mayoría de nuestros compañeros. Finalmente se dijo que esté Ramona y acá está.

– ¿Finalmente Castells formará parte de su equipo de asesores?

– Sí, es uno de mis principales asesores junto a Adrián Morales.

– El MIJD no es un partido que sea muy conocido a nivel nacional. ¿En qué consiste la militancia de su partido?

– La militancia consiste en bajar a los barrios, en tener contacto con la gente, decirle que se puede reclamar por sus necesidades, pero que nos tenemos que agrupar, porque de otra manera no nos dan participación en nada. Es la unión de los que menos tenemos, de salir a la calle y protestar: esa es la tarea que viene haciendo el movimiento desde hace años y en todas las provincias.

– ¿Qué significa para la organización estar representada en el Congreso?

– Para el partido es una alegría saber que después de 17 años de estar trabajando podamos llegar aquí. Sabemos que con estar acá no vamos a solucionar los problemas, pero por lo menos vamos a hacer que se nos escuchen desde adentro y desde afuera, y vamos a hacer ver todos los problemas que existen en los barrios a quienes no los quieren ver. Como nosotros estamos día a día en los barrios sacando a los chicos de la calle, integrándolos a nuestras universidades populares y a los numerosos cursos que existen para que puedan trabajar, cuando hoy en día tenés 18 años y no tenés trabajo o tenés 50 y ya sos viejo, vamos a asistir a toda esa gente.

– ¿Es verdad qué no cobrará más de tres mil pesos de sueldo?

– No voy a cobrar más de tres mil pesos. Teniendo en cuenta las necesidades que tienen miles de compañeros, los que cobran quienes están en el plan Argentina Trabaja o lo que cobra un jubilado, no puede Ramona Pucheta bajo ninguna circunstancia cobrar más de todos los que la rodean. Lo hemos planteado en todas las asambleas que hemos tenido y hasta llevamos a un escribano para que certifique que así va a hacer. El resto del sueldo se va a poner en una caja única para cubrir todas las necesidades, no solamente de la organización, sino de cualquiera que lo necesite, y vamos a decir lo que se hizo con ese dinero mediante nuestras revistas.

– ¿En qué temas tiene pensado enfocarse a lo largo de su mandato como diputada nacional?

– Fundamentalmente, todo lo que tenga que ver en lo social, si bien tengo colaboradores en todas las áreas. En lo particular me destaco más en lo social, que es lo que vengo haciendo desde hace años. Esta organización viene de mano de los jubilados y hay algo que todavía le debemos, así que vamos a impulsar el 82 por ciento móvil. Precisamente la semana pasada me integré a la Comisión de Previsión y Seguridad Social.

– Usted forma parte del interbloque Frente Peronista. Ahora bien, el MIJD reivindica la figura de Ernesto “Che” Guevara mientras que algunos de sus compañeros se ubican muy lejanos ideológicamente del líder comunista. ¿Cómo es posible convivir con esta posición?

– Cuando nos presentamos como partido buscamos la posibilidad de ingresar por las urnas. Pero fue imposible por toda la plata que tenés que tener, más aún nosotros somos una organización independiente. Buscamos todas las posibilidades y nadie nos dio una mano. En este caso ha aparecido Alberto Rodríguez Saá que nos dio la posibilidad de integrar la lista trabajando conjuntamente. Pero cuando vinimos nos encontramos con que Compromiso Federal se unificaba en un bloque con el duhaldismo y con los de De Narváez. Cuando supimos todo lo que iban a hacer nos identificamos. Formamos parte de este grupo, pero no coincidimos con algunas de sus ideas. No somos peronistas. De hecho voté en contra el proyecto de ley antiterrorista cuando ellos votaron a favor.

– ¿Por qué formar parte del interbloque entonces?

– ¿Con quiénes otros podíamos formar parte si en el momento de las elecciones ninguno nos dio la oportunidad? Solamente trabajando con Alberto Rodríguez Saá tuvimos la posibilidad de formar parte de una lista. A ellos nos debemos. Ellos hicieron alianza con la otra gente, entonces nosotros nos identificamos y decidimos hacer un monobloque. Además entendemos que el Estado de San Luis es lo más parecido a lo que impulsamos. Vamos a trabajar con la gente de San Luis, y por más que impulsen un proyecto en el cual no estemos de acuerdo vamos a decir que no. Libertad de expresión hay.

– Desde el kirchnerismo destacan los avances sociales que han realizado con la creación de puestos de trabajo, la industrialización de la economía, la estatización de las AFJP y la ley de movilidad jubilatoria. ¿Qué opinión tiene de estas políticas, teniendo en cuenta que su fuerza está compuesta de trabajadores, desocupados y jubilados?

– Sobre la política del kirchnerismo nosotros no vemos que haya más trabajo. Si ellos llaman trabajo a un plan social, le digo no. Si lo llaman al plan Argentina Trabaja, le digo no. Si ven bien que un jubilado cobre 1.400 pesos, le digo no. Hasta ahí le digo que estamos en contra de ello, que vamos a seguir peleando por todo esto. Cuando se está haambreando más el pueblo ellos dicen que está todo bien. Nosotros decimos que no está todo bien porque somos los que realmente estamos militando en la calle y que lo podemos decir tranquilamente.

– ¿Qué opinión tiene de Cristina Fernández de Kirchner?

– La respeto como militante, pero deja mucho que desear con su prepotencia. La presidenta habla y larga unas lágrimas que para nosotros ya son de cocodrilo. Muchos de nuestros compañeros cuando la ven por televisión apagan, no la pueden escuchar a una persona que cree que va a trabajar para el pueblo y está con la base. Pero no está. Para los que menos tenemos, los K no existen. Están únicamente para los que tienen. La respeto como mujer, pero como política y como presidenta de mi país me deja para decir.