Por César Montenegro

El legislador del bloque Nuevo Encuentro Edgardo Adrián Form aclara que su espacio político no es parte orgánica del Frente para la Victoria y “mucho menos del Partido Justicialista”, razón por la cual tiene una mirada propia sobre el acontecer político. Asevera que goza de autonomía e independencia para plantear sus propuestas.

“Somos una vertiente de esta nueva realidad que vive la Argentina”, afirma respecto a Nuevo Encuentro, el partido que le permitió ocupar una banca en la Legislatura.

Form tildó ante Parlamentario como deficiente la gestión de Mauricio Macri al frente de la administración de la Ciudad y sobre Cristina Fernández sostuvo que lleva adelante un proyecto que apunta a modificar estructuralmente la realidad de la Argentina haciendo hincapié en un “Estado presente y activo en la aplicación de políticas”. Remarcó la necesidad de disminuir la pobreza, la exclusión y la indigencia a nivel cero y expresó que el país requiere de una modificación del sistema tributario argentino, “que es absolutamente regresivo”.

– ¿Cuáles son sus expectativas respecto a la labor parlamentaria que desarrollará?

– Son muchas. Estamos dispuestos a trabajar intensamente como corresponde a la tarea legislativa, con el propósito de elaborar a través de las herramientas que dispone este Cuerpo -leyes, resoluciones y declaraciones- respuestas que sean oportunas y eficaces para las múltiples demandas de la sociedad porteña que están pendientes de solución. Creemos que esta institución tiene que ser una caja de resonancia de la problemática ciudadana.
Las comisiones tienen que estar abiertas a escuchar a los vecinos, pero al mismo tiempo procurar encauzar esas inquietudes a través de propuestas concretas de proyectos diversos. En lo particular, la experiencia de gestión en el ámbito cooperativo, al cual yo pertenezco, -me desempeñé en él a lo largo de 40 años- espacio que me permitió desempeñar la presidencia de la Confederación Cooperativa de la República Argentina entre el 2009-2011, un período que fue muy rico en lo que se refiere al aprendizaje y a tareas como impulsar la realización durante el presente año del Congreso Argentino de las Cooperativas, en el marco del año internacional de las cooperativas dispuesto por las Naciones Unidas. La experiencia de gestión en la economía solidaria será también uno de los nutrientes para la actividad legislativa.

– ¿Cómo amalgamará su experiencia cooperativista con la labor parlamentaria?

– En primer lugar, conociendo la problemática cooperativa, la especificidad de las leyes, los usos, las costumbres, la práctica y los resultados concretos. Al respecto adelanté a la presidenta de la Comisión de Vivienda que podemos aportar ideas para la actualización de la Ley 341, que es una norma muy importante para la Ciudad en materia de vivienda para sectores que hoy no pueden acceder a ella, y también en otros aspectos como por ejemplo buscar asociar a través de la práctica cooperativa de sectores involucrados en el microempredimiento, para que puedan tener una escala mayor de producción y de acceso a las demandas de los consumidores y consecuentemente mejorar el nivel de sus ingresos.
Tenemos que ver de qué manera se pueden trasladar algunas experiencias de cooperativas, por ejemplo en lo que respecta la recolección de residuos sólidos domiciliarios, la selección, su posterior procesamiento y eventualmente la comercialización de los mismos.
Al respecto, en la Ciudad hoy se pueden observar decenas o centenares de cartoneros recorriendo las calles de Buenos Aires, en ese sentido nos parece que una forma de dignificar ese trabajo es ayudándolos a que se organicen solidariamente, con una apoyatura del Estado porteño y de las organizaciones con experiencia que pueden también patrocinar esta tarea de recolección, indispensable para darle racionalidad al destino de los residuos sólidos urbanos.

– Usted expresa una visión esperanzadora en cuanto a la labor que pueda desarrollar la Legislatura para beneficio de los vecinos…

– Tengo esperanzas, pero también soy realista. Sé de las limitaciones, máxime en vista a lo que ha sucedido en los últimos meses, en donde la Legislatura tanto con participación del oficialismo como de la oposición ha aprobado casi por unanimidad leyes que luego fueron vetadas por el Poder Ejecutivo. Aquí aparece un problema que habrá que ver de qué manera y cuándo se resuelve y que es una falta de articulación entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo; ello habrá que resolverlo, de lo contrario el rol de la Legislatura queda desdibujado; es que pareciera que en lo formal está de “adorno” ya que se ve dificultada a cumplir con su función específica.
Sin perjuicio de esa realidad, desde nuestro ángulo, es decir desde el bloque de Nuevo Encuentro, desde el interbloque con el FpV y del Frente Progresista y Popular haremos todo lo que esté a nuestro alcance para generar los mejores proyectos posibles; además de generar los debates indispensables hacia el interior del Cuerpo. Queremos hacer de alguna manera docencia cívica, dándole trascendencia hacia la opinión pública a estos proyectos y demostrar de esa manera que es posible y que si no se hacen, es por falta de voluntad política y por falta de creatividad en materia de elaborar proyectos de ley que redunden en beneficios de los vecinos.

– ¿Nuevo Encuentro forma parte efectivamente de un interbloque?

– Cuando se constituyó la nueva Legislatura manifestamos formalmente, mediante nota refrendada por los presidentes de los tres bloques (Nuevo Encuentro-FpV-FPyP) la voluntad y el compromiso de constituir el interbloque. Ese interbloque existe. Necesitamos ahora pasar a una nueva etapa de coordinación de iniciativas parlamentarias, iniciativas políticas en el ámbito del interbloque; lo cual no estará exento, obviamente, de algunas dificultades porque cada bloque tiene sus prioridades, su agenda, pero la voluntad de articular acciones legislativas está. El futuro dirá si ello es posible, nosotros por lo pronto apostamos a ello.

– Su optimismo contagia, pero hay once bloques opositores en el Parlamento…

– Hay una dispersión que refleja la dispersión política e ideológica que existe en Buenos Aires; pero creo que tenemos que hacer los esfuerzos necesarios en la construcción de consensos, sobre todo en algunos temas cardinales para ejercer el mandato que nos dio la ciudadanía procurando que desde la Legislatura hagamos la mejor gestión posible para gravitar sobre el Poder Ejecutivo. Debemos también monitorear la labor de los funcionarios del Ejecutivo que tienen que poner en acción todo aquello que emana del Poder Legislativo.
Lo cual no significa que sea fácil, porque por algo hay once bloques diferentes. La fragmentación es una realidad que no solamente se refleja en la Legislatura porteña, existe en toda la República Argentina; pero quienes tenemos vocación de unidad, quienes estamos comprometidos con proyectos que trascienden lo circunstancial, tenemos que redoblar esfuerzos para aunar voluntades y llevar a buen término las propuestas.

– ¿Cuál es su evaluación de la gestión de Macri?

– Muy crítica, porque recordemos que durante la campaña previa a ser electo jefe de Gobierno su slogan era de que contaba con equipos, con experiencia, con preparación previa, que estaban entrenados como para dar respuesta a un sinnúmero de problemas pendientes de la Ciudad. La gestión de cuatro años dejó mucho que desear. Es opinión generalizada que hubo grandes deficiencias en materia de gestión: el tema de las escuelas, hospitales, vivienda, los problemas del tránsito, en fin un sinnúmero de temas que permiten calificar de deficiente la gestión de Macri.
Hechos recientes como el tema del subte, ponen en evidencia que hay una diferencia entre el concepto acuñado de que “gobernar es resolver el problema de la gente” y la actitud que asume el jefe de Gobierno frente a un tema que a todas luces requiere que el Gobierno porteño se ocupe del mismo; porque indudablemente subterráneos pertenece al Gobierno de la Ciudad y debe ser administrado por esa administración; sin perjuicio de los mecanismos de transición que requiere el traslado de las potestades que tenía el Gobierno nacional hacia la gestión porteña. Esto hace prever que así como no se han resuelto problemas importantes en su primer Gobierno, en esta segunda gestión difícilmente se resuelvan por este camino que ha adoptado el Gobierno porteño-

– ¿El mensaje de Macri inaugurando las sesiones ordinarias 2012, fue un discurso de lanzamiento hacia el 2015?

– El lo dijo explícitamente, que no iba abandonar su rol de alternativa; de ahí a que pueda lograrlo, es otro tema; pero todo lo indica y los medios dominantes, lo ubican como un posible contrincante, más un equipo encabezado por Emilio Monzó está abocado a conformar alianzas con distintos sectores políticos para articular una estructura que en el 2015 confronte con el FpV y sus aliados. El propio Monzó dijo que no es innegociable la candidatura de Macri, lo cual hace prever que si no logran capitalizar la oposición nacional dispersa, están dispuestos a resignar la candidatura y apoyar a quien emerja durante los próximos cuatro años.

– ¿Qué opinión tiene de la gestión de Cristina Fernández?

– Cristina Fernández de Kirchner está conduciendo un proceso que se inició en el 2003 y apunta a modificar estructuralmente la realidad de la Argentina, haciendo incapie en algunas cuestiones claves, tales como un Estado presente y activo en la aplicación de políticas y en la generación de iniciativas para solucionar un sin fin de temas. Hay medidas como la Asignación Universal por Hijo, la estatización del sistema previsional, la modificación de la Carta Orgánica del Banco Central, demuestran un rumbo, todavía incompleto y quizá insuficiente, claramente diferenciado a la orientación que tomó la Argentina en al década de los ’90 y que fuera continuidad del rumbo encauzado durante la etapa cívico-militar. Es decir que la presidenta se encuentra al frente de un proyecto nacional con desarrollo económico, inclusión social e inserción en el mundo, desde una postura soberana; lo cual también se refleja en el proceso de unidad con los otros países que han iniciado procesos similares en América Latina y el Caribe. Es decir que nuestro espacio político Nuevo Encuentro, apoya y acompaña el rumbo que condujo hasta el 2009 Néstor Kirchner y continúa la presidenta, aunque ello no es óbice para que tengamos nuestra propia mirada, nuestra autonomía y nuestra independencia, digamos que como se hizo mención en un documento reciente de Nuevo Encuentro “formamos parte del amplio espacio kirchnerista, sin estar formando parte orgánica del Frente para la Victoria y mucho menos del Partido Justicialista”. Somos una vertiente de esta nueva realidad que vive la Argentina. Así se define Nuevo Encuentro.

– ¿Qué apuntaría como asignaturas pendientes en la gestión de CFK?

– En el debe hay todavía un conjunto de temas muy importantes. Hay que generar un amplio debate sobre los recursos energéticos de la Argentina, cómo se modifica la matriz energética del país, cómo se recupera la soberanía argentina sobre los recursos energéticos no renovables, el tema del transporte a nivel nacional, y en particular lo concerniente a los ferrocarriles que requiere no solamente de un debate, sino también de políticas activas. Estamos de acuerdo con el proyecto de reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, pero seguimos pensando que hace falta derogar la ley de Entidades Financieras de la dictadura y establecer una nueva norma que quisiéramos que fuera la iniciativa que presentó el diputado nacional Carlos Heller en el Congreso nacional. Reitero, sin perjuicio de valorar y acompañar plenamente la propuesta de reforma de la Carta Orgánica del B.C.R.A. que recoge muchos de los conceptos y propuestas contenidas en el proyecto del diputado Heller.
Está pendiente también lograr que el nivel de la pobreza y de exclusión social o de la indigencia sea el deseable, y para nosotros el único nivel deseable es cero; es decir pobreza cero, indigencia cero. Argentina es un país inmensamente rico, con un territorio inmensamente extenso y con pocos habitantes. De manera que hay que persistir en un rumbo que garantice la distribución de la riqueza para que en un proceso, cuanto más corto mejor, logremos tener pobreza cero, indigencia cero y bienestar para toda la sociedad.

– ¿Hacia dónde estará direccionado su trabajo legislativo, en qué comisiones trabajará?

– Integraré cinco comisiones: Presupuesto, Vivienda, Cultura, Defensa de Consumidores y Usuarios y Salud.

– La comisión de Vivienda es la que más asignaturas pendientes tiene…

– Sin dudas, ya que se estima que hay alrededor de 500 mil personas que en la Ciudad tienen carencias habitacionales; ya sea los casi 180 mil que viven en las villas, asentamientos, casas tomadas u hoteles precarios. Además de los que viven en situación de calle que, según un censo realizado por el Gobierno porteño, éstos serían unos 800 o 1.000 personas y otro estudio realizado por una ONG que afirma que existen alrededor de 15 mil.

– ¿El vecino de la Ciudad qué puede esperar del diputado Form?

– Mucho trabajo, aportes desde la economía solidaria, disposición a escuchar y aprender mucho y aportar proyecto e iniciativas diversas. Vamos a recorrer la Ciudad, en el caso de la Comisión de Vivienda ya se acordó recorrer los emprendimientos que están en marcha para verificar en qué medida se avanza en qué medida no se cumplen los plazos estipulados. Además los vecinos pueden esperar coherencia con una trayectoria de mas de 40 años de trabajo en la economía social, en el movimiento cooperativo. A esta altura de mi vida no voy a cambiar ni mis convicciones ni tampoco mi modo de trabajar. Es decir que los vecinos que nos han votado y los que no también, pueden esperar de mi labor legislativa coherencia con lo que prometimos en la campaña, mucho trabajo y propuestas que sean creativas y útiles.