La presidenta del bloque Unión por Todos, Patricia Bullrich, presentó un proyecto para expresar su repudio y preocupación a raíz de las declaraciones realizadas el lunes pasado por la presidenta, Cristina Kirchner, con relación a las notas publicadas por los periodistas Osvaldo Pepe y Carlos Pagni en los diarios Clarín y La Nación.

“Sobre el artículo de Osvaldo Pepe dijo que le parecía “muy nazi” su referencia a que los camporistas parecían tener el “mismo gen” de la “soberbia” que habían exhibido en los 70 los militantes montoneros” y sobre el de Carlos Pagni expresó “sentir cierto tufillo antisemita” por su referencia al marxismo de Kicillof y a que se trata de un “bisnieto de un rabino que había venido de Odessa”, recordó Bullrich.

A pesar de que la diputada aclaró que no comparte personalmente la expresión de Pagni, sostuvo que tiene el deber de “impedir que esta política de descalificación, de discriminación de medios, de construcción de una palabra oficial como la verdad, siga el camino y el recorrido que día a día transita”.

“Este no es un hecho aislado, es parte de una estrategia para que los medios se sometan o desaparezcan. Lo mismo sucedió con el programa que se emite por C5N que fue interrumpido abruptamente por algún llamado oficial”, denunció Bullrich.

La legisladora exigió cumplir con el derecho a la libertad de prensa y consideró que se trató de un “agravio” hacia los periodistas, “que empaña los derechos constitucionales como norma indispensable para una convivencia democrática, basada en la libertad”.

“Esta actitud descalificatoria de quien ejerce tan alto cargo en nuestra Patria y que debería gobernar para todos los habitantes de nuestro suelo es inaceptable y debe rechazarse como modelo y herramienta de coerción para evitar el ejercicio del derecho al disenso”, argumentó finalmente Bullrich.