A partir del recambio legislativo, diputados del orden gremial y militantes de la agrupación kirchnerista La Cámpora y del Movimiento Evita buscarán resaltar su presencia en el Congreso. Parlamentario repasa los nombres de quienes pretenden ser protagonistas.
Por Carolina Ramos
La nueva composición de la Cámara baja traerá mucha tela para cortar. Los nuevos integrantes del Cuerpo ya se sumaron a los diputados que continúan con su mandato para imponer una agenda que promete ser nutrida en temas que ocupan a dos grupos de legisladores: los del palo militante y los de extracción gremialista. Hay fuertes intereses en juego, y la mayoría K en el recinto promete ser un pasaporte al éxito para algunos y un enorme obstáculo para otros.
En el marco de la relación turbulenta que en los últimos tiempos une a la CGT con el Gobierno, ya hubo señales de la firmeza con la que los diputados moyanistas se plantaron ante una iniciativa oficial. Fue en diciembre, cuando el joven Facundo Moyano, titular del gremio del peaje, y Omar Plaini, de los canillitas, se negaron a poner la firma al dictamen de mayoría sobre el nuevo Estatuto del Peón Rural, actitud que se repitió en el recinto dos días después, cuando el texto se convirtió en ley a pesar de la férrea oposición de la UATRE, con Gerónimo “Momo” Venegas a la cabeza.
Por otra parte, todo hace pensar que los diputados ligados a la central obrera de Hugo Moyano volverán a poner en el tapete temas tales como el polémico proyecto de Héctor Recalde (FpV) para repartir las ganancias de las empresas entre los trabajadores; iniciativa que en 2010 puso en alerta a más de un sector empresario, y a la cual hasta la misma presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, le bajó el pulgar. Será difícil entonces que la bancada oficialista acompañe el proyecto de los cegetistas, al menos por este año.
Otro de los temas que podría interesar a esta nueva camada de legisladores es el aumento del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias: una iniciativa impulsada por el arco opositor, aunque su debate haya fracasado por falta de quórum en dos sesiones especiales convocadas el año pasado, en mayo y octubre. Sin embargo, con la holgada mayoría que tendrán ahora el kirchnerismo y sus aliados, las chances de que este proyecto prospere son más que dudosas.
No hay que olvidar tampoco que durante la definición de los nombres para las candidaturas de las últimas elecciones, generó un gran malestar en las filas de la cúpula de la CGT por los pocos lugares otorgados por Cristina Fernández en las listas del Frente para la Victoria, y que quedaron lejos de cumplir con sus expectativas.
En otro orden, cabe destacar la gran visibilidad pública que logró en los últimos tiempos la agrupación liderada por Máximo Kirchner, La Cámpora, y que le valió a sus candidatos importantes lugares en las listas que luego fueron validados con el contundente resultado electoral del 23 de octubre. Estos jóvenes militantes, sumados a los del Movimiento Evita, ya son piezas que hay que tener en cuenta.
Los gremios, presentes
Las listas del Frente para la Victoria que participaron de las elecciones no dejaron a la CGT tan bien parada como se esperaba. Dos diputados moyanistas terminaron su mandato el 10 de diciembre pasado: los dirigentes de Camioneros Octavio Argüello y Antonio Alizegui, mientras siguen en sus bancas el dirigente sindical de Comercio, el matancero Julio Ledesma; la cordobesa de la UEPC, Carmen Nebreda y el pampeano de la UOCRA, Roberto Robledo. A esta menguada lista se suma el dirigente petrolero de Mendoza Juan Dante González.
Así las cosas, la tríada Moyano-Plaini-Recalde tendrá varios pares del orden gremial con quienes discutir ciertos temas.
La CTA cuenta ahora con tres bancas: las de los porteños Claudio Lozano (FAP), Jorge Cardelli (Proyecto Sur) y el bonaerense Víctor De Gennaro (FAP). Lozano logró revalidar su banca por la Ciudad de Buenos Aires en las últimas elecciones, mientras que Cardelli continúa en su banca hasta el año que viene. Aun más, ambos supieron ser colegas en la bancada que conduce Fernando “Pino” Solanas. Por su parte, De Gennaro ya adelantó ante Parlamentario que, para este período le interesa debatir temas como propuestas de distribución del ingreso, de salario digno, y de avance en el control de la renta financiera.
Tampoco hay que olvidar una pieza clave en la bancada oficialista, como lo será seguramente Carlos Gdansky, secretario general de la UOM La Matanza. Edgardo Depetri, en tanto, es uno de los diputados con impronta tanto sindical como militante. Ambos perfiles confluyen en el bonaerense, quien proviene de la ATE (Asociación de Trabajadores del Estado), dentro de la CTA, y también lidera el Frente Transversal. También Facundo Moyano, quien además de su labor en el gremio de los peajes, es activo militante de la Juventud Sindical.
Otros gremios que se harán notar en el recinto serán, llamativamente, los docentes. La misionera Stella Maris Leverberg, al frente de la Unión de Docentes de la Provincia de Misiones (UDPM), fue reelecta por el Frente Renovador. A ella se le sumó Aída Ruiz (Frente Cívico por Santiago), secretaria general del Sindicato de Obreros y Empleados de la Educación y la Minoridad (SOEME).
Desde el campo, sector que busca reconstruir lazos con el Gobierno, llega el santafesino Omar Barchetta (Partido Socialista), referente de la Federación Agraria al igual que tres diputados con mandato desde 2009: el chaqueño Pablo Orsolini (UCR), la cordobesa Estela Garnero (Córdoba Federal) y el pampeano Ulises Forte (UCR).
Por último, vale mencionar a la diputada electa Ramona Puchetta, integrante del Movimiento Independiente de Jubilados y Pensionados y mano derecha del dirigente piquetero Raúl Castells. La bonaerense, que finalmente asumió su banca, comentó a este medio que desde su monobloque impulsará una vez más el 82 por ciento móvil para los jubilados.
Militancia a flor de piel
Entre las agrupaciones La Cámpora y el Movimiento Evita, que ya pasaron a engrosar las filas del oficialismo, suman nada menos que once militantes que lograron convertirse en diputados, en su gran mayoría jóvenes.
Por la Ciudad de Buenos Aires, un hombre que tendrá un peso real de importancia, inclusive en la conducción del bloque que lidera Agustín Rossi, es Andrés “Cuervo” Larroque, secretario general de La Cámpora.
Por la provincia de Buenos Aires ingresaron a la Cámara baja, Eduardo “Wado” De Pedro -quien además de jugar un rol central en la agrupación acompaña a Mariano Recalde en la dirección de Aerolíneas Argentinas-; Andrés Arregui -quien fuera intendente del partido de Moreno- ; Mayra Mendoza -que también fue gerente de Relaciones Institucionales de la ANSeS-, y Santiago Aragón -decano de la Universidad de Lomas de Zamora-.
A la lista de legisladores que responden a la agrupación juvenil se suma la pampeana María Luz Alonso, quien había recibido el propio apoyo de la presidenta en su candidatura por el Partido Humanista.
Otro de los distritos que tendrá su representante de La Cámpora es Mendoza, con la abogada Anabel Fernández Sagasti. Por Santa Fe hará lo propio Marcos Cleri, y por Tucumán Marcelo Santillán, ambos funcionarios de la ANSeS.
Cerrando la lista de dipumilitantes, la JP Evita contará con la presencia del líder del movimiento, el bonaerense Leonardo Grosso, quien se sumará a Adela Segarra, referente de esta misma agrupación que continúa con su mandato. Otro joven, el tucumano Luis Sacca, llevará al recinto la voz de la Juventud Radical.
