El presidente de la Cámara de Diputados fue el primer respaldo legislativo que encontró su par del Senado, Amado Boudou, tras la exposición que hizo en el Salón Illía de la Cámara alta. Allí Julián Domínguez dijo que “a lo largo de la historia argentina, la estrategia de quienes no aceptan a la dirigencia política avalada por el voto popular, fue la descalificación, el desaliento permanente para poner en crisis la acción de los gobiernos nacionales y populares”.

Desde la propia Cámara baja, Agustín Rossi defendió el accionar del vicepresidente al señalar ante la agencia oficial Télam que “cuando se tocan intereses de los poderosos, seguramente que pueden hacerse presentes estos ataques”. A su juicio, Boudou “está sufriendo una embestida del poder corporativo, que tiene como único fin deslegitimar

Otro que salió en defensa de Boudou fue el senador nacional Aníbal Fernández. Lo hizo a través de su cuenta de Twitter, donde escribió: “La operación periodística contra Amado Boudou, es vergonzosa. La mugre no le perdona que los denuncie. No aflojes ni un tranco e' pulga…!!!”.

Respecto del allanamiento a una propiedad de Boudou, Rossi dijo que “hacerlo en una propiedad que no habitaba Boudou es una expresión contundente de la embestida que sufre”, y advirtió que “existe un hecho clave en esta situación, y es que nadie que ha venido ostentando intereses tan fuertes durante tanto tiempo (en relación a los medios, resigna esa situación de privilegio y sus intereses mansamente”.

También defendió a Boudou el jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina, quien dijo que el Gobierno “nunca va a dejar que las mafias y las corporaciones empresarias y mediáticas lo condicionen”.

Asimismo el vicegobernador Gabriel Mariotto salió a respaldar al vicepresidente, señalando que “la condena mediática a Boudou es una operación de los grupos monopólicos a un hombre que representa al Proyecto Nacional”. Agregó: “Yo pongo las manos en el fuego por Amado y por todos los compañeros que integran el Proyecto Nacional y Popular”.

El legislador porteño Aníbal Ibarra , del Frente Progresista y Popular, dijo que la exposición “fue oportuna porque puso claramente su posición e hizo subir al escenario a otros actores involucrados que hasta el momento no aparecían”.

Además, se mostró alarmado por “la filtración del allanamiento hasta los titulares mentirosos que indicaban que se estaba en la vivienda personal del vicepresidente”.

Y desde la provincia de Buenos Aires, el legislador provincial y vicepresidente de la Cámara baja, José Ottavis, dijo que lo que definió como una operación contra el vicepresidente “no es más que el resultado del fin de la etapa Magnetto, del fin de los monopolios, de quienes aún no han aceptado que esta Argentina ya no pone los intereses de los poderosos por sobre los del pueblo”.

“La mafia del juego, la mafia de Boldt, y la mafia de Clarín conducida por Magnetto tienen los mismos mecanismos, operan del mismo modo, uniendo sus fuerzas en el objetivo común de perpetuar sus negocios a expensas de nuestro pueblo. Nada de eso nos sorprende, estamos acostumbrados a las mentiras de los mafiosos detrás de las letras de molde”, agregó.