El juez federal Norberto Oyarbide resolvió cerrar el período de instrucción en la causa en la que se investigan escuchas telefónicas ilegales y en la que se encuentran imputados el jefe de Gobierno Mauricio Macri y el exministro de Educación de la Ciudad, Mariano Narodowsky. También se encuentran acusados el exjefe de la Policía Metropolitana, Jorge “Fino” Palacios y Ciro Gerardo James.

La causa que se tramita ante el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal Nº 7, a cargo de Oyarbide, se lo investiga a Macri por la presunta responsabilidad en los delitos de asociación ilícita, violación de secretos, abuso de autoridad y falsificación de documentos públicos.

El juez notificó a las partes sobre su decisión, por lo que se abrió un período de seis días hábiles para que presenten impugnaciones o nuevas medidas de prueba. Igual trámite instrumentó para con el fiscal, quien será él en definitiva quien confirme o no la elevación a juicio oral. Si la decisión es llevarlo al banquillo a MM, el inicio del enjuiciamiento podría demorarse hasta dos años.

Desde el Gobierno porteño salieron a cuestionar la decisión del juez y acusaron al Gobierno nacional de estar detrás de una “embestida” contra la Ciudad.

Al respecto el presidente de la Comisión de Justicia, Martín Ocampo, manifestó ante Parlamentario su convicción de que se “observa claramente que el cierre del procedimiento de instrucción tiene como finalidad manejar los tiempos de la causa, para que el debate oral se produzca en el 2014 al momento que se lleve a cabo el debate sobre las candidaturas presidenciales. Me parece que el manejo de los tiempos judiciales tiene como objetivo, causarle el daño más grave posible a la postulación de Mauricio Macri como candidato presidencial”, afirmó el diputado oficialista.

En ese mismo sentido se expresó el legislador Oscar Zago quien aseguró que: “Fue el propio Mauricio Macri quien solicitó que se lo someta a juicio, luego del trabajo realizado por la Comisión Investigadora de la Legislatura y en la que se demostró de que no existía ninguna prueba que involucre al jefe de Gobierno en el tema sobre escuchas ilegales”, sostuvo.

“Fue todo una payasada” enfatizó y remarcó: “Todos sabemos que es una operación política del Gobierno de la Nación”.

“Quienes solicitan que el jefe de Gobierno dé un paso al costado ignoran que fue él quien pidió someterse a juicio, pero de ninguna manera dará un paso al costado, porque todos estamos convencidos de que es absolutamente inocente y no se dará lugar a todas las operaciones políticas que se implementan desde la Secretaría de Inteligencia y del Gobierno nacional”, manifestó Zago quien es un reconocido dirigente radical que desde 2003 participa del proyecto del Pro y que además expresó duras palabras para con el presidente de la UCR, Mario Barletta quien había sostenido la necesidad de que Macri diera un paso al costado en su calidad de jefe de Gobierno al encontrarse próximo a enfrentar un juicio oral.

“No caben dudas que dentro de la estructura del radicalismo hay algunos personajes que están trabajando para el Gobierno nacional, lamentablemente. El doble discurso que se implementa desde el radicalismo es lo que le hace daño al partido. Porque usa un discurso duro en el recinto y luego termina acompañando los proyectos del kirchnerismo. Ello ocurre porque algunos personajes del radicalismo mantienen un aceitado contacto con sectores del oficialismo nacional”, afirmó el dirigente y diputado porteño del radicalismo Pro.

Lo que dice la Constitución

Sin embargo, a pesar de la claridad con la que expresara el presidente de la UCR sobre la conveniencia de que el jefe de Gobierno tomara licencia de su cargo, el arco opositor en el Parlamento porteño mayoritariamente no baraja esa posibilidad ya que la Constitución de la Ciudad no lo prevé, aunque sí hay sectores que ven con agrado esa variante aún antes de que se inicie el juicio oral.

Lo que sí contempla la Constitución de la Ciudad en su artículo 92 es lo siguiente: “La Legislatura puede destituir por juicio político fundado en las causales de mal desempeño o comisión de delito en el ejercicio de sus funciones o comisión de delitos comunes, al gobernador, al vicegobernador o a quienes los reemplacen; a los ministros del Poder Ejecutivo, a los miembros del Tribunal Superior de Justicia; del Consejo de la Magistratura; al Fiscal General; al Defensor General; al Asesor General de Incapaces; al Defensor del Pueblo y a los demás funcionarios qué esta Constitución establece”. Es decir debe existir un proceso judicial que derive en juicio y que el imputado sea declarado culpable en el mismo.

El arco opositor

Para conocer la opinión de la oposición y su posición respecto al juicio político que, inexorablemente, pareciera que enfrentará el titular del Ejecutivo porteño, y cuyo dictamen no se conocería hasta el segundo semestre de 2014, Parlamentario preguntó a cada uno de los referentes de los bloques opositores si Macri debería alejarse del cargo mientras se sustancie el proceso judicial. A continuación lo que contestó cada uno de ellos.

Aníbal Ibarra (Frente Prog. Y Pop.): “No. Creo que en esto hay que ser cuidadoso porque está en juego la institucionalidad, con ello quiero decir el voto popular. No hay que cometer el error de avanzar en reclamar una licencia o algo por el estilo. Ello debe transcurrir en el fuero íntimo de Mauricio Macri, es él quien debe decidirlo, pero constitucionalmente no es obligatorio exigírselo. Sí es grave, y no es menor que esté un jefe de Gobierno procesado por espiar ilegalmente a ciudadanos. Prefiero ser cuidadoso y esperar al juicio oral y si en esa instancia es condenado comienza a funcionar el mecanismo del juicio político, porque es una causal establecida por la Constitución. Por ello quiero ser respetuoso del voto popular y no quiero hacer lo que ellos hicieron años atrás. Ahora Macri habla de persecución política cuando en realidad han sido los jueces y no uno, sino varios, los que lo sometieron a proceso. Por eso mismo prefiero la institucionalidad, no voy pedir que tome licencia ni ninguna otra cosa por el estilo; está en su fuero íntimo que se someta al juicio oral como corresponde, es decir como le corresponde a cualquier ciudadano procesado. La condena judicial es el instrumento que habilita la apertura del juicio político”.

Rubén Campos (UCR): “Es una opinión personal del presidente del Comité Nacional del radicalismo; se puede acordar o no. No es una expresión orgánica de la Mesa Nacional del partido y tampoco a nivel federal. De cualquier manera el tema está en manos de la Justicia. Hay que ser cauto y esperar que se resuelvan todos los pasos procesales, luego de lo cual se determinará, en la oportunidad que corresponda, la conveniencia de que el jefe de Gobierno deje transitoriamente su cargo hasta que resuelva la Justicia las imputaciones que le fueron hechas. La verdad que estas expresiones de mi partido nos hace perder de vista la verdadera problemática social que es la inflación permanente y constante que tiene cada una de las amas de casa cuando concurren a realizar sus compras y se tapan con estas cuestiones que no hacen al meollo de cada familia, en particular en la sociedad argentina”.

Julio Raffo (Proyecto Sur): “La situación procesal de Macri no ha cambiado. El estaba procesado de antes. El apeló el procesamiento y la Cámara confirmó el procesamiento. En ese momento yo opiné que una persona procesada no tenía el ánimo para continuar en su cargo; pero bueno la situación no cambió. Ha cambiado una etapa procesal, estaba procesado de antes y sigue procesado; en realidad la instrucción terminó. Es decir el juez consideró que debía terminarla y da traslado al fiscal y al imputado. En esta instancia, tanto el fiscal como el procesado pueden considerar que la instrucción no está finalizada porque faltan pruebas o hacen algún tipo de observaciones. Después que contestan ambas partes y si coinciden con lo resuelto por el juez, se pasa a la segunda etapa, que es el juicio oral. En cuanto a que si debiera tomar licencia, yo en oportunidad de su procesamiento opiné que una persona que ejerce un cargo público y es procesada debe tomar licencia en el cargo que desempeña, lo dije antes y lo sigo pensando. Si luego de todo este procedimiento que, con algún optimismo puede calcularse que puede llevar un año más, queda firme que todo la causa está para ser llevada a juicio oral, es allí donde empieza verdaderamente el juicio”.

Fernando Sánchez (CC):” En realidad el jefe de Gobierno no tiene obligación constitucional de tomar licencia. Ahora, se debería preguntar es que si puede llevar adelante con normalidad sus funciones como jefe de Gobierno teniendo que afrontar y destinar tiempo y compromiso a su defensa en un juicio oral, eso es otra cosa; ello lo tendría que evaluar el propio Macri. Yo lo que pretendo es que el juicio sea rápido, transparente y sea justo, para que el jefe de Gobierno pueda dar las explicaciones que tiene que dar y que son muchas. Luego del juicio oral que se desarrollará frente a otro tribunal distinto al tan mencionado juez Oyarbide, nosotros en la Legislatura deberemos analizar qué es lo que tenemos que hacer acá. El hecho de que un jefe de Gobierno deba enfrentar un juicio oral es muy grave, tener un jefe de Gobierno imputado de delito serios, habla de la calidad de funcionarios que estamos teniendo. Me parece que así como el jefe de Gobierno está en la situación procesal en que está, en la misma debería estar medio Gabinete nacional”.

Francisco Nenna (Frente p/ la Victoria): “Macri debería tomar licencia para trabajar en su defensa porque está más cerca de un eventual juicio oral. Cuando se procesa un docente o un trabajador estatal de la Ciudad, se le inicia un sumario administrativo y se lo aparta del cargo mientras dura el litigio judicial. El jefe de Gobierno sigue procesado porque la Justicia investiga su responsabilidad en el espionaje a opositores, pero se hace el distraído y culpa al Gobierno nacional como si la Casa Rosada le hubiera sugerido que contratara al Fino Palacios y al espía Ciro James. No hay propaganda ni conferencia de prensa que borre la presunción de su responsabilidad en el delito que se investiga. Macri defendió a Fino Palacios como el mejor Policía mientras se montaba el aparato de inteligencia en la Ciudad. No lo defendió por error, sino porque está convencido de que espiar, perseguir y reprimir a sus adversarios políticos es natural”.