El diputado nacional Ricardo Alfonsín sostuvo que “el llamado progresismo del gobierno, es un progresismo sin convicción, devaluado, degradado e ineficiente. Y el progresismo ineficiente es tanto o más dañino que el neoliberalismo en la gestión”.

El diputado radical explicó que “no se trata de intervenir la economía de cualquier manera sino hacerlo de manera eficiente y virtuosa”.

El líder del Morena dijo que “el Gobierno tuvo éxito en instalar la idea que el Frente para la Victoria es progresismo en gestión, pero si siguen cometiendo los errores y negando los problemas la sociedad va a tomar distancia no sólo del gobierno, sino del pensamiento progresista y socialdemócrata que puede terminar pagando, en su conjunto, los patos rotos. De esta forma, el gobierno promueve y está facilitando una salida por derecha”.

“Si se piensa bien, el partido de gobierno no es progresista. No se puede ser progresista y agraviar las instituciones, ser poco transparente en la gestión, ser cortoplacista o descalificar a quien piensa diferente ya que son características contradictorias con ese pensamiento”, sostuvo Alfonsín.

El diputado radical dijo que “no alcanza con decir que se es progresista porque se cree que el Estado debe intervenir en la economía; el capitalismo de amigos supone intervención en la economía pero de progresista no tiene nada y eso es lo que ha hecho el gobierno”.

Con referencia a la interna partidaria Alfonsín explicó que “la calidad de vida de los individuos de una sociedad depende de la calidad de los gobiernos, de la calidad de los partidos. Y la calidad de los partidos depende de la calidad de su militancia. Yo estoy seguro que en la UCR tenemos los hombres y mujeres militantes de mejor calidad. Hagamos lo posible para que este espacio se pueda imponer en las próximas elecciones internas, porque eso repercute en la sociedad”.

Por su parte el diputado (MC) candidato a convencional nacional Gustavo Serebrinsky sostuvo que “toda la economía es un dibujo: sólo 1 de cada 4 jefes de familia tiene un trabajo estable; el resto está sostenido desde el Estado. No queremos punteros políticos diciendo a quién se asiste y a quién no, quién come y quién no come en la Argentina. Debemos ir hacia la universalización de todos los planes sociales para terminar con la extorsión y el condicionamiento a quienes menos tienen”.

Serebrinsky dijo que “nuestro desafío es terminar con la pobreza para crecer. No crece un país con empleo en negro, por ejemplo. Pensar que la juventud argentina está representada en La Cámpora, en la militancia rentada, es un error”.

Con respecto a la interna del partido, Serebrinsky dijo que “no vamos a entrar en la pelea chica, queremos formar una UCR que sea la alternativa. Una UCR que le dice No a Macri, No a Cristina y Sí a Ricardo Alfonsín”.

El concejal y candidato a titular del comité radical de Mar del Plata, Mario Rodríguez, también fue uno de los oradores y aseguró que “el día más importante en el que hay que pensar es el posterior al de la interna, para construir un radicalismo grande que sea gobierno en Mar del Plata en el 2015. Así como hace 2 años fuimos a una interna que ganamos no con soberbia sino por convicción, hoy tenemos que actuar frente a esta interna, de la misma manera”.

Participaron también del acto el senador provincial Carlos Fernández y el ex intendente de Necochea Daniel Molina, el concejal Javier Rapalini, el candidato a convencional provincial Oscar Pagni, entre otros.