Poco después de que el cardenal Jorge Bergoglio cuestionara severamente a los legisladores que promueven la liberalización de la tenencia de droga para consumo personal, el senador kirchnerista Aníbal Fernández reclamó a la Iglesia “no mirar para el costado” en ese debate.

Bergoglio hizo referencia a “los mercaderes de la muerte” y el senador Fernández aclaró que él personalmente está en contra de ellos, al tiempo que aclaró que no pretende incentivar “a nadie, ojalá nadie consumiera nada de estas porquerías, pero tenemos la situación arriba de la mesa”.

En declaraciones a Telefé, Fernández dijo: “Ojalá pudiera apretar un botón y tener resuelto que no haya nadie que le venda porquerías a nuestros pibes para que consuman”, pero aclaró que lo que no hace “es meter la cabeza como el avestruz en un agujero. Veo que la realidad indica que esto está sucediendo, que están consumiendo sustancias”.

En respuesta a Bergoglio, Aníbal Fernández dijo que coincide con él cuando habla de “los mercaderes de la muerte que le venden mugre a nuestros pibes. Los dos estamos de acuerdo, yo estoy en contra de los mercaderes de la muerte”. Apuntó que los consumidores “son víctimas dos veces, del traficante y de la propia legislación”, por lo cual puntualizó que la ley que auspicia dirá que el consumo de drogas “se podrá concebir dentro de lo que es una acción privada de los hombres”.

“Si se permite que eso sea así, ¿para qué lo manda a comprar la marihuana, si es necesario, a un traficante? Déjelo que lo cultive. En todo caso, no consumirá pis de los perros o amoníaco, para conservarla. Consumirá un producto menos gravoso”, advirtió.