Resulta lamentable que un sector que acompañó a Néstor Kirchner durante largos años, utilice medidas extremas como el bloqueo de las destilerías de combustible y ahora un paro general con movilización a la Plaza de Mayo.

Son medidas de carácter extorsivo tomadas sin mayores debates ni consultas, en un contexto internacional de muy difícil resolución para los sectores populares. Precisamente mientras Europa y gran parte del mundo aplica medidas de ajuste estructural en contra de los que menos tienen, en América Latina, en nuestro país se está piloteando la crisis a partir de incorporar nuevas políticas y acciones de gobierno para fortalecer el mercado interno y el Estado Nacional. Frente a la crisis del dólar y del mercado exterior, se responde con más iniciativas populares y progresistas.

Después de la recuperación de YPF y del lanzamiento del Plan de Viviendas Pro.Cre.Ar. volvemos a reiterar nuestro apoyo a la marcha general del gobierno encabezado por Cristina Fernández de Kirchner. Un paro general en este contexto obedece a fines políticos de presión, de un sector sindical que aspiraba a ocupar importantes cargos gubernamentales, tal como el Secretario General de Camioneros y de la CGT solicitó a todas voces, hace ya tiempo.

Reclamos legítimos como el aumento del mínimo no imponible o de las asignaciones familiares, entre otros muchos temas de interés social que es necesario incorporar en la agenda política, no pueden ser utilizados como instrumento para castigar y golpear a un gobierno popular. Un gobierno que ha dado sobradas muestras de su compromiso con los trabajadores y el conjunto del pueblo.

Para profundizar el modelo de gobierno popular existente, llamamos a rodear a Cristina Fernández de la más amplia solidaridad, redoblando las medidas destinadas a lograr la unidad de todos quienes queremos construir una Argentina justa, libre y soberana, integrante de una América Latina definitivamente emancipada.

Naddeo es diputada porteña del Frente Progresista y Popular