El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación Argentina, Julian Domínguez, junto a los diputados Margarita Stolbizer, Ricardo Gil Lavedra y Manuel Garrido (todos miembros de PGA), presentaron públicamente la Declaración Global Parlamentaria, apoyando la adopción de un Tratado sobre Comercio de Armas (TCA). También participó.Pía Devoto, de APP y de la Coalición Armas Bajo Control.
El titular de la Cámara de Diputados de la Nación Argentina, Julián Domínguez, junto a la legisladora nacional Margarita Stolbizer y los diputados nacionales Manuel Garrido y Ricardo Gil Lavedra presentaron públicamente, junto Pía Devoto -de la Asociación Políticas Públicas-, la adhesión a la Declaración Global Parlamentaria, apoyando la adopción de un Tratado sobre Comercio de Armas (TCA) que se discutirá y negociará durante la Conferencia Diplomática de los Estados Parte de Naciones Unidas en Nueva York durante el mes de Julio.
Más de 1.600 parlamentarios de más de 70 países de todo el mundo han firmado la Declaración Global Parlamentaria sobre el Tratado de Comercio de Armas (TCA). PGA (Acción Mundial de Parlamentarios), APP (Asociación Políticas Públicas) y otras organizaciones han jugado un papel destacado en la promoción del Tratado y su apoyo a través de la Declaración de los parlamentarios de todo el mundo.
PGA es una organización sin fines de lucro, no partidista de la red internacional de más de 1.300 legisladores en más de 100 parlamentos electos en todo el mundo, tiene como objetivo promover la paz, la democracia, el imperio de la ley, los derechos humanos y el desarrollo sostenible.
Durante el mes de julio se realizará en Nueva York la Conferencia de Naciones Unidas, entre todos los Estados integrantes de su Asamblea, donde se analizará la adopción del Tratado sobre Comercio de Armas.
Stolbizer es miembro del Comité Ejecutivo de Parlamentarians for Global Action (PGA) y participará en calidad de observadora de la Conferencia de Naciones Unidas.
La firma del Tratado busca impedir que las armas vayan a parar a manos irresponsables, de organizaciones criminales y se usen para violar los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. Miles de personas sufren cada día las consecuencias directas e indirectas del comercio de armas sin regulación. Las armas deben estar bajo el estricto control de los Estados, que deben detener las transferencias cuando exista riesgo de que se usen para cometer abusos y atrocidades.
