Dos de los símbolos más representativos no sólo de Buenos Aires, sino de toda la Argentina son el Obelisco y la Plaza de la República. En este sitio tan destacado y que es visto como una de las imágenes del país, la bandera debe hondear en los cielos, tal y como lo hizo por primera vez en la Ciudad, exactamente en ese mismo lugar.

“El viejo mástil presentaba deterioro en sus materiales que lo hacían peligroso para las miles de personas que pasaban por la zona y tuvimos que retirarlo en 2010. Por eso, decidimos hacer uno nuevo que colocamos esta mañana”, indicó Diego Santilli, Ministro de Ambiente y Espacio Público.

Para la instalación de este nuevo mástil se construyó una nueva base de hormigón, más resistente que la anterior y se hicieron todos los cálculos estructurales para que sea resistente al viento.

Este fin de semana se realizaron los trabajos de instalación, de los que participaron grúas y otras maquinarias pesadas y el lunes se izarán las banderas de la Nación y de la Ciudad en las caras norte y sur, respectivamente.

“Este mástil tiene 15 metros de alto y es realmente imponente. Acorde al lugar donde va emplazado que es donde por primera vez se izó la enseña patria en Buenos Aires y que además es una de las postales del país. Por eso queremos que nuestra bandera se vea bien alta”, concluyó Santilli.