El director de Obras, Mantenimiento y Servicios Generales del Senado, Daniel Lauro, negó este martes ante la justicia que el vicepresidente de la Nación y titular de la Cámara alta, Amado Boudou, haya instalado un jacuzzi en su despacho del Congreso.

La declaración de Lauro se dio en el marco de la investigación del juez federal Norberto Oyarbide en relación sobre supuestas órdenes de Boudou para realizar cambios prohibidos para un edificio declarado patrimonio histórico.

Fuentes judiciales informaron a la agencia de noticias DyN que Lauro señaló que tampoco se modificaron los pisos del despacho de Boudou y que sólo se hicieron otras refacciones y se pintaron otras tres áreas del sector de Presidencia de Senado, para lo cual se contrató el más económico de los tres presupuestos presentados. Además, el testigo detalló que se llevó al despacho una cinta para correr, que es propiedad de Boudou.