El senador nacional advirtió que "la sucesión del kirchnerismo traerá dolores de cabeza al país" y cuestionó las vías de financiamiento del Gobierno nacional.
El mendocino Ernesto Sanz fue muy duro con el kirchnerismo, al plantear lo que puede venir en el marco de lo que muestra la crisis en la provincia de Buenos Aires.
El senador nacional señaló que “la sucesión del kirchnerismo le va a traer muchos dolores de cabeza al país, a la sociedad, al conjunto del pueblo argentino”.
A través de un comunicado, Sanz señaló que el problema de la provincia de Buenos Aires “es político y tiene que ver con la sucesión del kirchnerismo, que se transforma en una cuestión de federalismo fiscal”, y destacó que “los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires empiezan a pagar los platos rotos”.
El senador señaló que “en otros gobiernos provinciales donde hubo crecimiento del empleo público y derroche en épocas de las vacas gordas y ahora cuando ya no hay plata, aparecen” los problemas.
“Mientras las provincias son obligadas a financiarse con el mercado de capitales, la Nación se financia con el ANSES, es decir con la plata de los jubilados, con el Banco Central y con el Banco Nación”, dijo Sanz, para quien “hoy el gran peligro institucional que tiene la Argentina es que detrás de cada debate, está la intención de reformar la Constitución, pero no para mejorar ni la coparticipación ni la vida de la gente, sino para resolver el la sucesión en el kircherismo”.
Sanz alertó que “van a tratar de aprovechar la elección del 2013, para a ver si pueden reformar la Constitución. Por ello, las legislativas del año que viene son un llamado de atención para la sociedad argentina, porque si logran una buena elección van a tener la mayoría necesaria para llevarla adelante”.
