Stolbizer comparó al secretario de Seguridad con un “parapolicial” y sostuvo que la seguridad “se encuentra a la deriva”. Para Donda, “si hay corrupción es imposible que baje el delito. Una cosa es fuente y causa de lo otro”.
La presidenta del bloque de diputados nacionales del Gen/FAP, Margarita Stolbizer, cuestionó a la ministra Nilda Garré por pedir a los vecinos que controlen a la policía. “Creíamos que la Policía vigilaba y el Gobierno la controlaba. Ahora resulta que somos los vecinos los que tenemos que vigilar y controlar a la Policía. En cualquier momento va a decir que los ciudadanos somos responsables por no avisar lo que hace la Policía. El kirchnerismo ha logrado dar vuelta las cosas, para intentar ocultar la realidad y sus propias responsabilidades”, expresó la diputada Stolbizer.
Agregó la legisladora bonaerense que la ministra de Seguridad “ha perdido poder a manos de su secretario de Seguridad, que más bien parece un parapolicial al mando de procedimientos ilegales. Y por eso sale a pedir ayuda a los vecinos para que controlen a la Policía. Este planteo es de una irresponsabilidad total”. Para Margarita Stolbizer, “desde la autoridad se cometen los atropellos y desde la comunidad tenemos que salir a frenarlos. El gobierno ha perdido la brújula y la seguridad está a la deriva”.
A su vez, la diputada Victoria Donda opinó sobre las declaraciones de Nilda Garré: “Creo que la ministra está atrapada en sus propias contradicciones. Reconocer que hay ‘focos de corrupción’ en la Policía Federal y que los locales de trata de personas trabajan con cierta vista gorda de esta misma policía y al mismo tiempo afirmar que ‘no hay aumento del delito’ en la ciudad de Buenos Aires, es sumamente contradictorio. Una cosa es fuente y causa de lo otro, sin excepción”, expresó la legisladora de Libres del Sur
Por otro lado, la referente del FAP agregó que “una de las cuestiones que están más verificadas es que las personas que sufren de actos delictivos ya ni hacen las denuncias porque han perdido confianza en la policía y eso no significa necesariamente que haya bajado el delito; en todo caso no se registra. Cada vez más se hace necesario reestructurar las fuerzas policíacas, fundamentalmente para que recuperen credibilidad y el delincuente realmente sienta que su accionar va ser perseguido por el Estado y no una institución donde ir a negociar una zona liberada, una coima; o incluso ir a pagar ahí un ‘servicio adicional’ para que al vecino común no le desvalijen su comercio”.
