Según el diputado radical mendocino Enrique Vaquié “el Poder Ejecutivo expone en el proyecto de ley de Presupuesto que el crecimiento del 2012 es de 3,4% del PBI, eso es falso: las estimaciones más serias indican que el crecimiento de este año es cercano a 2,5%. ¿Por qué hacen esto? Se nos ocurre que la respuesta está en los artículos Nº 33 y Nº 71 del Presupuesto 2013. Si el crecimiento es mayor al 3,26%, el Estado argentino debe pagar el cupón del bono ligado al PBI emitido para salir del default en 2005”.

El exministro de Hacienda de la provincia de Mendoza explicó: “Esta estimación habilita al Poder Ejecutivo para derivar U$S 7.967 millones de las reservas para integrar el Fondo del Desendeudamiento Argentino, a pesar de que difícilmente esa obligación deba cumplirse. El mismo artículo nº 33 del proyecto dispone que en caso de resultar un excedente y siempre que tengan efecto monetario neutro, el mismo se destine a financiar gastos de capital”

“Por otra parte, el artículo Nº 71 autoriza al Ministerio de Economía a constituir fideicomisos, efectuar préstamos o constituir aportes de capital por hasta U$S 2.000 millones para la ejecución y/o financiación de proyectos de exploración, explotación, industrialización o comercialización de hidrocarburos en empresas del sector hidrocarburífero en las cuales el Estado nacional tenga participación accionaria. Solo hay dos casos que encuadran en esa definición: la fallida ENARSA e YPF. Descartando que el ejecutivo decida seguir desperdiciando recursos en ENARSA, nos queda la nueva YPF estatal que encuentra dificultades para capitalizarse y encarar el ambicioso plan exploratorio que propone Miguel Galluccio (malamente conducido por sus actuales jefes, el trío de De Vido- Kicillof- Moreno). Siguiendo la ruta del dinero, las adecuaciones presupuestarias que habilita el mismo proyecto permitirán destinar reservas del Banco Central para capitalizar la YPF estatal”, afirmó Enrique Vaquié.