Para el diputado y economista radical Eduardo Vaquié, la implementación de esa facultad “constituye el reaseguro de la entrega de fondos públicos a los amigos del poder, la garantía de impunidad”.
La última semana, Cámara de Diputados de la Nación aprobó la cuenta de inversión (el gasto realizado) presentada por el Poder Ejecutivo Nacional correspondiente a los años 2007 y 2008. La aprobación corrió por parte del bloque del Frente para la Victoria y sus aliados y contó con la oposición de la Unión Cívica Radical.
El diputado radical Enrique Vaquié afirmó que “la facultad de cambiar sin límites el destino de las partidas presupuestarias y de aumentar el total de gasto autorizado esconde decisiones que surgen a la consideración pública muchos años después de su ejecución. Esto constituye el reaseguro de la entrega de fondos públicos a los amigos del poder, la garantía de impunidad”.
El economista sostuvo que, a partir de diciembre de 2007, tanto Néstor Kirchner como Cristina Fernández fuerzan los límites de la Ley de Administración Financiera N° 24.156 para eludir el control del Poder Legislativo. “Al impedir el control, no cumplir las leyes que regulan el gasto y al ejecutar el mismo con absoluta discrecionalidad, el ejemplo de Trenes de Buenos Aires corre serios riesgos de generalizarse a cualquier otro aspecto de la vida pública”, explicó Enrique Vaquié.
“En 2007 y 2008, los presupuestos aprobados contemplaban subsidiar a Trenes de Buenos Aires mediante transferencias por $ 153 y $ 319 millones de pesos respectivamente. Como consecuencia de modificaciones al gasto autorizado originalmente y de los aumentos dispuestos mediante los DNU, el Gobierno nacional transfirió a TBA un total de $ 486 millones ($ 333 millones más) en 2007 y $ 506 millones en 2008 ($ 187 de más respecto de los $ 319 millones originales). Es decir, se incrementó un 110% el gasto previsto sin ningún tipo de control ni condicionalidad a un grupo empresario amigo. En las condiciones que se mantuvieron hasta la tragedia de Once, los responsables operativos de la empresa recibieron $ 520 millones de pesos de más, lo que permitió una la inversión en vías y material rodante inexistente, uno de los motivos principales del accidente”, concluyó el diputado radical.
