El pleno de la Cámara alta aprobó el pedido tratamiento de preferencia con dictamen para la próxima sesión referido al proyecto de comunicación impulsado por el bloque oficialista. Miguel Ángel Pichetto denunció “maniobras para bloquear las vacantes”.
Las consecutivas reuniones frustradas del Consejo de la Magistratura que deja trunca la designación de jueces calentó el termómetro legislativo. Encabezados por Miguel Ángel Pichetto, el bloque del Frente para la Victoria presentó un proyecto de comunicación instando a la Corte Suprema de Justicia a que intervenga y determine una resolución.
Cabe señalar que todo conlleva a cubrir la vacante del juzgado que debe expedirse sobre la constitucionalidad del artículo 161 de desinversión, en la antesala del 7 de diciembre.
El escrito “solicita al Tribunal Supremo que se aboque a analizar y resolver la situación de notoria gravedad institucional, generada por injustificadas y arbitrarias maniobras de bloqueo realizadas por un grupo de integrantes del Consejo de la Magistratura”. Además, el oficialismo presentó un proyecto de ley postergado desde el 2002 para modificar el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación e incorporar el “per saltum” o avocación por salto de instancia.
Para el legislador rionegrino existen “maniobras para bloquear las vacantes” y apuntó directamente a sus pares de la oposición, mientras que su par Marcelo Fuentes sentenció que se trata de un problema entre “un grupo fáctico de poder y un Gobierno democrático”.
El radical Mario Cimadevilla, les recordó que es integrante del Consejo y recogió el guante: “No estoy impidiendo absolutamente nada, porque los consejeros de su bloque no dan quórum”. Redoblando la apuesta, opinó que lo sucedido “pone en evidencia que al Ejecutivo le molesta que le pongan límites”.
En la misma sintonía se expresó el titular del bloque de la UCR, Luis Naidenoff, quien les preguntó “cuál es el temor” ante una apelación y sostuvo que la situación es un “papelón”. Asimismo, informó que no acompañarán la moción del FpV y sentenció: “Al oficialismo le obsesiona este ‘grupo fáctico de poder’ y a nosotros nos interesa la garantía de la libertad de prensa en Argentina”.
Sin faltar al debate, el peronismo disidente se expresó con la voz de Adolfo Rodríguez Saá: “La pelea entre Magnetto y Cristina están llevando al país en una situación lamentable, dañando las instituciones”.
