A 29 años de las elecciones que pusieron fin al Proceso de Reorganización Nacional, el 30 de octubre de 1983, el bloque que conduce Ricardo Gil Lavedra resaltó el triunfo de Raúl Alfonsín que definió como “un cambio copernicano respecto de las prácticas autoritarias que habían signado buena parte de nuestra historia”.
El bloque de diputados nacionales de la Unión Cívica Radical recordó los 29 años transcurridos desde las elecciones presidenciales de 1983, en las que triunfó ampliamente Raúl Alfonsín, reafirmando su compromiso con los valores constitucionales que cimentaron el inicio de la democracia recuperada.
“Tras la larga noche de la última dictadura militar, que llevó el desprecio por los principios fundamentales del Estado de Derecho a extremos que la Argentina no había conocido, la presidencia de Alfonsín significó un cambio copernicano respecto de las prácticas autoritarias que habían signado buena parte de nuestra historia a partir del 6 de septiembre de 1930”, expresaron a través de un comunicado.
Agregaron que “un hito singular de ese gobierno fue la promoción del juicio, por parte de tribunales ordinarios, a los responsables de tremendas violaciones a los derechos humanos, cuando aún controlaban los resortes de las Fuerzas Armadas y la Argentina era una isla democrática en medio de gobiernos militares en casi toda América Latina. Tal decisión, en aquellas circunstancias, fue sólo posible por el extraordinario coraje cívico del Presidente de la Nación, de los magistrados que cumplieron cabalmente su deber y de un puñado de personalidades, con Ernesto Sábato a la cabeza, que se sumergieron en los sótanos del horror para elaborar un informe ejemplar, que hoy pretende ser mancillado por quienes quieren imponer un relato histórico notoriamente falso”.
“Los radicales no reclamamos la propiedad de la figura de Alfonsín, que es de todos los argentinos. Pero no admitimos que, con fines espurios, se la intenten apropiar, vaciándola de sus contenidos esenciales, aquellos que hoy están despojando a nuestras instituciones de los valores por los que Alfonsín luchó toda su vida: los de una democracia pluralista para una sociedad abierta, con libertad e igualdad, en la que la Constitución y las leyes imperen por sobre los empobrecedores personalismos que impiden que la Argentina tenga un destino de desarrollo con equidad social”, puntualizaron a través de un comunicado.
Los radicales concluyeron señalando que “el 30 de octubre de 1983 los argentinos votaron por una democracia de ciudadanos. Los radicales seguimos trabajando por el logro de ese ideal”.