Por Eleodoro Dof

Los legisladores opositores que integran la Legislatura de la provincia de Buenos Aires concentraron su resistencia, con distintos matices, en la Ley Impositiva 2013 donde se plantea un “nuevo aumento de la presión tributaria” sobre los bonaerenses, pero no les alcanzó para forzar cambios de fondo al proyecto remitido por el gobernador Daniel Scioli.

Con bajas que resultan significantes a la hora del “conteo fino”, la oposición parlamentaria no avaló el “aumento de la presión tributaria” que planteó el Poder Ejecutivo provincial en la Ley Impositiva 2013.

Efectivamente las principales bancadas de la Cámara baja y alta, el Pro Peronismo o Unión Pro Peronista, de la UCR, de Unión Celeste y Blanco y el FAP-GEN acompañaron en general el proyecto de Presupuesto e hicieron observaciones en particular de diversas maneras, pero concentraron su negativa, en general, con la ley Impositiva aunque esto no impidió que el oficialismo gire, finalmente el proyecto sancionado, en jornada completa de un sólo día.

La CC-ARI y una diputada del FAP, que se apartó de la votación del bloque, votaron sendos proyectos, en general en contra, sumando solo cinco rechazos totales al Presupuesto 2013, en la Cámara baja y sólo uno en la alta. El resto de los diputados y senadores del “no oficialismo”, con muchos rechazos en particular, terminaron acompañando la “ley de leyes”.

Y si bien la oposición concentró su disidencia en la ley Impositiva, no todos los “no oficialistas” se opusieron al proyecto remitido por Scioli con leve modificaciones, ya que votó a favor, en general, el bloque “moyanista” de Lealtad Peronista con una ausencia y una presencia; el diputado Jorge Mancini ausente y el diputado Héctor Martínez presente junto al oficialismo. Más sorprendió el voto del bloque independiente, con lazos en la Federación Agraria, de Proyecto Bonaerense, si bien el diputado Jorge Solmi observó algunos artículos de la ley Impositiva en la votación en particular, el voto fue positivo en general. También fue afirmativo en general el voto del monobloque de Alternativa Peronista, de Ricardo Lissalde.

Con el apoyo de estos bloques pequeños la bancada de 41 integrantes del FpV-PJ más los incondicionales aliados de Nuevo Encuentro, en la Cámara de Diputados, logró alcanzar la mayoría simple necesaria para aprobar esta fundamental herramienta de gestión de la administración Scioli.

En el Senado las bancadas de la UCR, de Unión Pro Peronista y el GEN-FAP tuvieron el mismo comportamiento que en Diputados, votaron en contra y a favor, con observaciones en particular del Presupuesto.

Es oportuno detallar que los inconvenientes de proporcionalidad del oficialismo se encuentran en Diputados y mucho se dice que el acuerdo alcanzado, en momento, de la votación del Presupuesto y la Impositiva. Algunos interpretan que este acuerdo podría prolongarse a lo largo del año venidero, es decir el 2013.

En Diputados, a diferencia del Senado, el oficialismo no tiene quórum propio, no llega al mágico número de 47 diputados, en una Cámara de 92 bancas repartidos en 11 bloques. El FpV-PJ contó y cuenta con el acompañamiento incondicional del sabbatellismo de Nuevo Encuentro, que suman tres diputados al conjunto de la bancada oficialista de 41 y si nos detenemos en el detalle de la votación por “la ley Impositiva” donde se arrastró a dos diputados de Proyecto Bonaerense y de Lealtad Peronista más el de Alternativa Peronista; es decir 41+3+2+2+1 igual a 49, un número que incluyo soporta ausencias circunstanciales de uno o dos integrantes del combo.

Fue este cruce, de hecho, el que hizo estallar por los aires el precario acuerdo que se había alcanzado entre los grupos no oficialistas que entusiasmó a algunos que empezaron a hablar de “la oposición” en la Provincia, pero duró poco. Se presentó en sociedad con el ingreso formal del proyecto de ley, firmado por 48 diputados, sobre la denuncia del Pacto Fiscal para que el Gobierno nacional deje de descontar el 15 % de Coparticipación que se “redireccionan” al ANSES de la masa primaria y todo parece indicar que cumplió un primer ciclo con la votación dividida de estos grupos en la ley Impositiva, para alegría de la ministra de Economía, Silvina Batakis, que observó las sesiones desde los palcos oficiales en ambos recintos del Palacio Legislativo.

No obstante, algunos líderes opositores no se dan por vencidos, entienden que el Presupuesto es una herramienta que no se puede negar al gobernador, y que por tratarse en conjunto con la ley Impositiva hay un criterio que consideran a esta complementaria de aquella. Ese, dicen, es el criterio que primó en algunos representantes no oficialistas en la votación reciente. Otros entienden que hay que hacer “tabla rasa” y comenzar de cero con aquellos que efectivamente quieran ser opositores. No es mucho lo que se puede hacer en el recinto de la Cámara baja si no se mantiene el número de 48, comentan resignados.