Esta vez, el diputado –que acompaña ocasionalmente al oficialismo- defendió firme su postura en contra: “No estoy de acuerdo con el manipuleo que esto significa. Están absolutamente acelerados por la cuestión Clarín”, lanzó.
“Estoy en contra de esta ley porque tiene nombre y apellido y porque no amplía en exceso lo que la Corte ya puede hacer”, sentenció este miércoles el diputado Felipe Solá, de Unión Peronista, quien de todos modos se ausentó del recinto a la hora de votar.
“Esta Corte, cuando ha querido meterse (en cuestiones de primera instancia) se ha metido, no tiene una imposición legal que le impida meterse en estos casos, pero lo decide la propia Corte”, justificó Solá, quien puso como ejemplo los casos de aborto no punible.
Si bien se mostró de acuerdo en que “el Gobierno lo intente con una ley y no con un DNU”, rechazó “el manipuleo que significa esto de ‘hagámoslo porque sino vamos a ser burlados por una gran corporación si al 7D sigue vigente alguna suerte de cautelar sobre el artículo 161 de la ley’”.
“Están absolutamente acelerados por la cuestión Clarín y por hacer cumplir un artículo de la ley que hace tres años que no se cumple”, sostuvo Solá, quien insistió en que “la cuestión que plantea la ley de per saltum no es solamente jurídica”, sino que “es una cuestión política”.
