El presidente de la bancada del peronismo disidente en Diputados, Enrique Thomas, manifestó su “absoluto respaldo” al gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, y lo defendió por los cruces con el Gobierno nacional: “Si algo hacía falta para demostrar que nuestro compañero encarna hoy la dignidad y la demanda federal de las provincias argentinas, es la sucesión de agravios que le dedicó la claque oficialista”, sostuvo.

En este sentido, el mendocino hizo hincapié en los “continuos ataques” a diferentes provincias por parte del Gobierno: “Del mismo modo en que lo hicieron con (Daniel) Scioli y (Daniel) Peralta, estos verdaderos campeones del vaciamiento estatal se arrogan autoridad moral para juzgar a las economías del interior; justamente ellos, que han tardado apenas once meses en defraudar el voto popular, desatando la protesta espontánea más importante del último medio siglo”, alertó.

Thomas explicó que desde el Gobierno “ya no puede esperarse otra cosa” que desconocer los pedidos de diálogo del gobernador cordobés, mostrando la misma “necedad y soberbia” con las que toma “los propios reclamos del pueblo movilizado”.

Al respecto, aseguro que las “chicanas” hacia De la Sota proferidas por el oficialismo no deben ser tomadas en cuenta, ya que provienen “de los mismos que condujeron a YPF y Aerolíneas Argentinas a su calamitoso estado actual o de los que saquearon los recursos de la Anses, despilfarrando inmoralmente el dinero de los jubilados”.

“Ninguno de ellos está en condiciones de formular alguna recomendación en materia económica. Tampoco política, ya que Diego Bossio o (Jaun Manuel) Abal Medina -por citar a los más vistosos- no han ganado jamás una elección ni en el patio de su casa”, enfatizó.

En contraposición, el diputado argumentó que “el compañero De la Sota fue cinco veces elegido por los cordobeses: tres veces como gobernador y dos como legislador nacional”.

Además, se refirió a la disputa que tuvo el gobernador con la ministra de Industria hace unos días: “Mucho menos debe preocuparse por Débora Giorgi, quien luego de ser durante años una de las economistas favoritas del establishment empresarial, pretende ahora ser reconocida por sus aportes a la causa nacional y popular”, consideró.