Senadores y diputados del arco opositor le pidieron a la presidenta que convoque a sesiones extraordinarias para aumentar al mínimo no imponible. Acusaron al Gobierno de financiarse a costa de los trabajadores y propusieron gravar otras actividades para no desfinanciar al Estado.
Con el respaldo de las CGT disidentes, legisladores de todo el arco opositor presentaron una carta destinada a la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, pidiéndole que convoque a sesiones extraordinarias para tratar los más de 60 proyectos presentados en ambas cámaras en relación al Impuesto a las Ganancias.
La misiva, rubricada por 110 legisladores nacionales de la UCR, el FAP (exceptuando a Unidad Popular, de Claudio Lozano), el peronismo disidente, el PRO y bloques minoritarios, obtuvo además el respaldo de la CGT de Hugo Moyano y de la CGT Azul y Blanca que conduce Luis Barrionuevo. No apoyaron la iniciativa Proyecto Sur ni la Coalición Cívica-ARI. Felipe Solá, si bien no estuvo presente, firmó también el pedido.
Senadores y diputados opositores presentaron la carta en conferencia de prensa en la Sala 2 del Anexo de la Cámara de Diputados. La propuesta, impulsada por el diputado Francisco Fortuna (Córdoba Federal) -alineado con el gobernador José Manuel De la Sota- busca que el Congreso de la Nación defina en torno al aumento el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias y establezca un mecanismo automático para su actualización.
“Felicito a los legisladores por la iniciativa, que a lo mejor no puede ser pero suma a las negativas que hemos tenido”, manifestó el jefe de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, que concurrió al encuentro escoltado por su hijo Facundo, diputado del Frente para la Victoria, por el dirigente de los peones rurales, Gerónimo “Momo” Venegas, y el titular del gremio de los empleados judiciales, Julio Piumato, entre otros.
En este marco, el titular del bloque de diputados del Frente Peronista, Enrique Thomas, consideró que sobre el Impuesto a las Ganancias “se puede hacer cualquier cosa, menos ignorarlo”. De igual manera, el diputado juecista Gurmesindo Alonso, señaló que “en el período ordinario no tuvimos chances para hacerlo y por eso le pedimos formalmente a la presidenta para tratarlo en extraordinarias, ya sea antes de fin de año, en enero o en febrero”.
Los legisladores rechazaron en duros términos la política impositiva del Ejecutivo. “No puede ser que el Estado Nacional se financie a costa del salario de los trabajadores. Es de una inmoralidad absoluta”, opinó Ricardo Gil Lavedra, de la UCR. Su par del socialismo, Juan Carlos Zabalza, coincidió en que el impuesto “perjudica a los trabajadores que ganan menos” y que el pedido en cuestión es un reclamo “de la sociedad argentina”.
Para el jefe del PRO, Federido Pinedo, “hoy pagan ganancias los más pobres y no los que más dinero ganan”. “Hay que subir el mínimo no imponible para reparar la inflación del pasado, pero para el futuro tiene que aumentar de forma automática”, agregó.
Además de aumentar el mínimo no imponible, el diputado del GEN en el Frente Amplio Progresista Gerardo Milman propuso gravar los plazos fijos, la renta financiera, y obligar a los jueces a pagar Ganancias, “para no desfinanciar el Estado”.
“El Gobierno no modifica el mínimo no imponible por cuestiones de caja”, dijo por su parte el diputado nacional Carlos Brown.
“Los trabajadores no quieren hacer horas extras”
“Espero que podamos hacer una reflexión. Los trabajadores no quieren hacer horas extras, o en nuestro caso viajes”, apuntó Moyano ante una sala colmada de legisladores de la oposición. “A través de un exdiputado que tenía la CGT, tuvimos la posibilidad de comenzar a discutirlo”, sostuvo, en relación a Héctor Recalde, con quien rompió lazos luego de saltar al arco opositor. Sin embargo, señaló, “cuando los intentamos (tratar) a través de ese diputado, la presidenta descartó la discusión”.
Moyano aprovechó la ocasión para pedirle al Congreso que discuta la extensión de las asignaciones familiares “mediante una iniciativa popular”. Reclamó por el dinero de las obras sociales y un “aumento de emergencia” a los jubilados, para “pasar un año medianamente digno”.
El camionero también se mostró arrepentido por haber apoyado la Ley de Movilidad Jubilatoria impulsada por el kirchnerismo: “No tuvimos en cuenta los índices del Indec, que son inexistentes”, dijo para referirse al aumento de precios que presiona sobre las jubilaciones.
Para cerrar su discurso, Moyano convocó a los legisladores a participar de la movilización a Plaza de Mayo el 19 de diciembre para “desagraviar a los jubilados y ratificar los reclamos” nombrados. “Están casi todos los que tienen que estar”, concluyó Moyano, aludiendo a los diputados del Frente para la Victoria. El único presente del bloque oficialista fue su hijo Facundo.
