Según fuentes confiables a las que accedió Parlamentario.com la propuesta enviada por el Poder Ejecutivo de la ciudad ha encontrado serios escollos para ser aprobada, aún entre los aliados más cercanos al oficialismo.

Estas mismas fuentes informaron a Parlamentario que son numerosos los ítems que son rechazados tanto por los bloques aliados como por los demás bloques opositores.

Principalmente el foco está puesto en el derecho a huelga de los trabajadores que por estas horas aún produce fuertes debates. Este aspecto es crucial para los espacios opositores ya que no quieren verse involucrados en el cercenamiento de los derechos laborales.

Otro de los puntos más polémicos del proyecto es que busca declarar al subte como “servicio público esencial”, con el objetivo de que los trabajadores garanticen su funcionamiento aún cuando estén llevando a cabo medidas de fuerza. El tema es de gran relevancia ya que de aprobarse el proyecto tal como fuera presentado por el Pro, el sistema de subtes sería perjudicado por la conflictividad laboral desde el momento mismo en que la ciudad asuma el control del funcionamiento.

También el aspecto financiero despiertas fuertes controversias ya que aún persisten en el aire la posibilidad o no de crear nuevos tributos para financiar el servicio; al respecto el proyecto oficialista plantea un aumento de los peajes de la Capital y las patentes de los autos de alta gama, además del cobro de un monto extra en las cargas de combustibles y GNC.