“Probablemente este sea mi discurso más sentido en los tres periodos que tengo como diputada. Lo que sé de explotación sexual lo aprendí de mujeres explotadas”. Con estas palabras inició su intervención la diputada Marcela Rodríguez en el debate por la Ley de Trata de Personas.

Con un durísimo discurso, la militante feminista le apuntó al “poder político”, la policía y los jueces por ser “cómplices” de la explotación sexual, y aseguró que la reforma a la Ley de Trata impulsada por el Frente para la Victoria “no va contra la explotación sexual”.

La ex ARI consideró que la trata de personas debe combatirse con una fuerte penalización del proxeneta, pero jamás con la penalización de las víctimas: “Es muy difícil que brinden testimonios con sus familias amenazadas”, explicó.

Rodríguez también reclamó políticas de salida laboral para que las víctimas no vuelvan a la trata y cuestionó el Consejo Federal que crea la reforma para articular acciones comunes. Al respecto, pidió “transferencia directa de ingresos, planes de empleo, de seguridad social”. “Hemos violado los derechos de estas mujeres. Necesitamos repararlos. Tenemos que poner plata. No se la pongamos al Consejo (que crea la ley), es una burocracia”, sostuvo.

“Quien paga por sexo tiene que ser penado”, insistió la diputada, que sin tapujos advirtió que “hay políticos que pagan por sexo”, según la informaron las propias víctimas.

“Este Congreso no ha hecho nada para cerrar (locales), castigar (proxenetas), y mientras tanto las condenadas son 40 por ciento mujeres, en muchos casos víctimas. Para ellas tampoco hacemos nada”, consideró sobre la reforma en cuestión.

Sobre la legalización de la prostitución, dijo que “es obvio que no lo podemos tener porque a nadie se le puede ocurrir un Estado así, violador de derechos humanos”. Sin embargo, dijo que hay un “Estado proxeneta porque se habilitan prostíbulos”.

La diputada del monobloque Democracia Igualitaria y Participativa cuestionó a sus pares y afirmó que el tema de la trata de personas “es un debate profundamente político porque estamos hablando de poder, el poder más real que puede haber en la sociedad; el que pueden tener una persona para poder usar los cuerpos de otras personas, que han sido desapoderadas de todo hasta de sus propios cuerpos”.

Aseguró en ese sentido que hay jueces, policías y médicos de hospitales públicos que habilitan los locales de prostitución. “La policía y el poder político están involucrados. El problemas no es que los jueces no mandan a hacer lo que tiene que hacer”, advirtió.

Fuertes cruces con el kirchnerismo

“A diferencia de lo que se ha dicho estos días, no creo que la explotación sexual sea inevitable. Cuando la senadora (Beatriz Rojkés) Alperovich dice que va a seguir estando, desnuda algo más profundo: Pensar que la prostitución sea algo cultural, que los varones tienen que ir. No es ella solamente, es un problema de un Gobierno”, apuntó Marcela Rodríguez contra los dichos de la senadora tucumana.

Pero más encendida se mostró contra las embestidas del kirchnerismo a la Justicia, cuando muchos oficialistas aseguraron que el tema de la trata es un problema del Poder Judicial.

“No hagan politiquería barata. No son estos jueces. Intenté durante el Consejo de la Magistratura enjuiciar a jueces y no me acompañó nadie, tengo 300 denuncias. Si quieren pelearse con Clarín, peléense. Pero no con los jueces metiendo a las mujeres de por medio”, lanzó Rodríguez.

La diputada feminista mostró las publicidades que le dieron a uno de sus asesores cerca del Congreso y lanzó: “Después díganme si no están luchando contra la explotación sexual”.

“Nunca hubo tantas mujeres con poder en este país: La Presidenta, ministras, nosotras. Podemos hacer dos cosas. O nos comprometemos o realmente estamos siendo colaboracionistas o cómplices”, concluyó Marcela Rodríguez.