El oficialismo logró imponer su mayoría y aprobó el memorando de entendimiento con Irán por la causa AMIA con 39 votos a favor y 31 rechazos, en una extensa sesión extraordinaria con casi 11 horas de debate, en el que no faltaron los cruces con la oposición. Así, el proyecto fue girado a la Cámara baja, donde será tratado en un plenario de comisiones el próximo martes y convertido en ley al día siguiente en el recinto.

Cabe señalar que el acuerdo bilateral establece la creación de una Comisión de la Verdad integrada por cinco juristas de prestigio internacional –dos argentinos, dos iraníes y un miembro extranjero- que evaluará los expedientes judiciales y emitirá una recomendación a ambas partes de carácter no vinculante. Además, desde el kirchnerismo destacan la trascendencia del proyecto ya que serán las autoridades argentinas quienes tomarán declaración indagatoria a los imputados en Teherán.

Desde el oficialismo, el titular de la bancada Miguel Ángel Pichetto, remarcó que “Argentina ha mantenido una línea de coherencia política” y destacó que el espíritu del memorando es que un juez local pueda ir a Teherán a tomar declaración indagatoria a los acusados. Más verborrágico, Aníbal Fernández minimizó los cuestionamientos de la oposición asegurando que presentó “argumentos pobres” en el debate, lo que aumentó el malestar en el recinto.

Durante el debate, que se inició a las 11.30 de este jueves, las críticas de la oposición estuvieron centradas principalmente en la ambigüedad del documento a la hora de la interpretación por ambas partes para llevar a cabo las declaraciones indagatorias y la adopción de una legislación. Así lo dejó manifestado la peronista disidente Sonia Escudero: “No sabemos qué dice la ley iraní. Estamos frente a un memorando muy oscuro”. Además, determinó que “el acuerdo es inconstitucional” debido a que se vulnera “la estructura del debido proceso legal”.

Otra de las críticas estuvo centrada en la falta del consenso legislativo e incluso el rechazo de las comunidades judías como la AMIA y DAIA. En este sentido Ernesto Sanz aseguró: “Creo que el esfuerzo es retórico para maquillar una realidad que el oficialismo no puede sostener con palabras. Lejos de aclarar, la cuestión oscurece”. Asimismo, volvió a insistir y lamentar la ausencia del fiscal de la causa, Alberto Nisman, durante el plenario de comisiones para que dé su opinión sobre el morando en cuestión. “Es un silencio que hace tanto ruido…”, manifestó.

El jefe del bloque del FAP, Rubén Giustiniani, también manifestó su rechazo. Al igual que el resto de los opositores, el santafesino consideró que con el acuerdo se viola la plena división de poderes ya que “el Ejecutivo y el Legislativo, interfieren en un proceso en pleno desenvolvimiento de una causa”. De esta manera, el documento se presentaría como un obstáculo para esclarecer la investigación: “No destraba ni acelera la causa y nos aleja lamentablemente de la verdad y la justicia”.

Sin embargo, en su calidad de miembro informante, el senador Daniel Filmus aseguró: “El memorando es un esfuerzo para que no haya impunidad, porque cuando hay impunidad la historia puede repetirse”. De esta manera, insistió que el objetivo del proyecto oficial es destrabar y avanzar en la causa judicial.

Con la misma crudeza opositora se expresó la peronista disidente Sonia Escudero quien determinó: “El acuerdo es inconstitucional”. La legisladora explicó que las autoridades judiciales se verán “sometidas” a lo regulado por la Comisión de la Verdad, ya que “en cierto punto” lo dictaminado por la misma sería vinculante. “Hay una alteración indebida de la estructura del debido proceso legal”, explicó Escudero ya que la Justicia como poder independiente quedaría sujeta a lo dictado por un organismo.

En la misma línea, Liliana Negre de Alonso opinó que los motivos que sustentan el memorando “son pensamientos absurdos e incoherentes”. La puntana fue incluso más allá y señaló que el hilo conductor de la medida es ejecutar el Plan Cóndor 2. Asimismo, se planteó reflexionar cuál es la relación con Irán en calidad económica que se estrecha día a día.

Haciendo caso omiso de las críticas puntuales, el oficialista Pedro Guastavino optó por no ahondar en los motivos que sustentan el acuerdo pero destacó que lo que caracterizó a Néstor Kirchner “es la búsqueda incansable de Justicia y Verdad”, actualmente continuada por Cristina Fernández. Asimismo, en directa alusión a la oposición cuestionó su “postura automática” de manifestarse en contra de todas las decisiones “de trascendencia” tomada por el Gobierno “para el bien de la sociedad”.

Desde el FAP, la senadora Norma Morandini cuestionó también la función de dicha Comisión y, si bien desde el oficialismo aseguran que el memorando es un paso más para avanzar en la causa, para la senadora “lo que se está negociando son otras cuestiones”. Su compañera de bancada, María Eugenia Estenssoro, aseguró que el acuerdo se está haciendo “en contra y de espaldas a las organizaciones judías”. Sobre la constitución de la Comisión de la Verdad, la senadora opinó que se busca sentar en el banquillo de los acusados “a la propia Justicia argentina”, en lugar de los imputados iraníes. “Parece que con los únicos que se negocia es los acusados”, finalizó.

“Todos los argumentos presentados son absolutamente pobres”, así se refirió el verborrágico Aníbal Fernández sobre las críticas opositoras. En clara alusión al pedido de Negre de Alonso, le retrucó: “Les reclamo prudencia a la hora de expresarse”. Con respecto al memorando, volvió a insistir sobre el estado de inmovilidad de la causa judicial y la gran oportunidad que representa el acuerdo para esclarecer la investigación. “Las decisiones se toman porque se tiene que ir para adelante”, definió.

De la misma forma se expresó el chubutense Marcelo Fuentes, quien explicó que “la política exterior requiere un mínimo de coherencia” y aclaró que “un convenio de entendimiento presupone que no hay entendimiento previo”, con lo cual se amerita una discusión para ponerse de acuerdo. Además, referido a las críticas opositoras opinó: “Transformado la cuestión casi en un ejercicio de debate literario empeñado en destruir lo alcanzado”.

La senadora Blanca Monllau adelantó su voto negativo por considerar que el tratado “hecha más sombra que luz, es desprolijo, impreciso y deja en claro –en cambio– que hay cuestiones no explicitadas, no sinceradas que nos son escamoteadas”. Y añadió que “una vez más, el Frente para la Victoria impone la fuerza de los números, más no de la razón, ya que no admite los consensos, desdeña las concertaciones, no admite las alternativas, tan sólo las que surgen de su ‘genio’ son válidas”.

Durante una encendida intervención, la oradora catamarqueña retrucó las palabras de los senadores oficialistas al considerar que sí la actual gestión de Cristina Fernández de Kirchner es el “gobierno de la memoria”, quizás sea, “para ser más precisos, el de la memoria selectiva, porque se bien se pone el foco en la violencia de los años 70, nada se dice de las 51 víctimas fatales, heridos y familias destruidas por la tragedia en la estación de Once”.

Por su parte, la radical Laura Montero contó haberse reunido con representantes de la comunidad judía mendocina y dijo que “salí consternada de esa reunión, por la sensación de impunidad, desprotección y el genuino temor de la comunidad judía de mi provincia y de todo el país”. Además, la senadora radical leyó una nota elaborada por los representantes de la comunidad judía y expresaba lo siguiente:

“La Sociedad Israelita de Beneficencia de Mendoza desea expresar su absoluta disconformidad con el Memorándum de Entendimiento entre el Gobierno argentino y la República Islámica de Irán en torno a la causa AMIA. Lo hacemos por entender que ningún argentino puede permanecer en silencio mientras se consuma este ardid de impunidad y avasallamiento a la soberanía nacional.

También queremos recordar que la Presidenta expresó que nada de esto se haría sin el consentimiento de los familiares directos de las víctimas. La gran mayoría de ellos, junto a AMIA y DAIA, ya se han expresado. Como representantes de la comunidad judía de Mendoza, apoyamos e instamos a apoyar ese legítimo rechazo. Por la memoria de las víctimas y en defensa de la justicia”.

A su turno, el senador fueguino de Nuevo Encuentro Osvaldo López defendió la creación de la Comisión de juristas propuesta en el memorándum para analizar toda la documentación reunida por autoridades argentinas e iraníes sobre el ataque terrorista y preparar un informe no vinculante. En este sentido, el legislador fueguino señaló que “se critica a la Comisión de Juristas sin saber siquiera quienes van a ser sus miembros”, al tiempo que aseguró que “desde el momento que se plantea la creación de una comisión, se da por sentado que estaremos hablando de juristas destacados e intachables”.

“Se pone en discusión una cláusula que como toda vez que se crea una comisión es de estilo, más allá de los términos en que la comisión dicte su reglamento interno”, sostuvo el senador y agregó: “si esta comisión confundiese lo que es un reglamento de funcionamiento propio, entonces no sería una comisión de juristas destacados”.

“Néstor y Cristina han hecho todo, siempre, para lograr verdad y justicia en el caso de la AMIA”, afirmó por su parte la chaqueña oficialista Elena Corregido, quien consideró que la mayoría de quienes hoy se oponen al intento de diplomacia para lograr la verdad en la causa AMIA, son los que representan a partidos o ex gobiernos que no hicieron absolutamente nada para esclarecer la tragedia.

Al hacer uso de la palabra, Liliana Negre de Alonso consideró que “la causa Amia es una deuda que tenemos todos los argentinos” y le pidió a la presidenta y al bloque oficialista que “tengan templanza en el ejercicio del poder. Es la única manera de avanzar en una República con consenso”.

“Lo que se está haciendo con éste memorando es un delirio. Y digo delirio en el sentido en que lo describe la Real Academia Española: despropósito, disparate, confusión caracterizada por la reiteración de pensamientos absurdos e incoherentes. Todo esto queda claro con lo dicho por quienes están a favor de este tratado, empezando por el propio canciller Héctor Timerman”, añadió la senadora puntana.

A su vez, la senadora Sandra Giménez sostuvo que “vamos a acompañar con firmeza y convicción este memorando, es una nueva oportunidad para buscar la verdad y la justicia” a pesar de que a través de las redes sociales haya sufrido insultos”.

Giménez consideró que el memorando es “una gran y una nueva oportunidad para esta justicia que tanto se necesita llevar adelante en la República y en el tema de la AMIA”.

El radical Arturo Vera señaló que su reflexión era más política que técnica, “en cuanto a las razones por las cuales estoy en contra de la aprobación del memorándum. Creo que todos, incluso los que estamos en contra de esta iniciativa presentada por el oficialismo queremos la verdad. Curioso es el modo de buscarla, puesto que este procedimiento tendría fines distintos a la búsqueda de la verdad”.

El senador dijo que “no posible que el Estado decline su potestad en la búsqueda de la verdad a través de entenderse con el gobierno iraní, que es el principal sospechado del atentado de acuerdo con los avances que ha realizado nuestra justicia”.

“Mientras los argentinos queremos la verdad los iraníes sólo quieren crear la comisión de la verdad”, señaló por su parte Eugenio “Nito” Artaza, quien remarcó que “el atentado a la AMIA no fue un hecho aislado sino que formó parte de la política exterior iraní; fue uno más de una serie de atentados terroristas que ha perpetrado el Estado Iraní en el resto del mundo”.

En éste sentido, Artaza preguntó: “Si Irán siempre negó los hechos, deslindó sus responsabilidades, dilató y negó todo, ¿por qué tenemos que creer que con nosotros va a actuar diferente?”