En efecto, el pedido del flamante papa caló hondo en los legisladores, puestos en la disyuntiva de hacerle caso a Bergoglio y perderse tan magno acontecimiento, o viajar por las suyas y justificarlo. Es el caso del senador Eugenio “Nito” Artaza, quien se considera amigo de Francisco y como tal no podía faltar. Por eso aclaró que si bien integraba la comitiva oficial, programó su traslado a Roma de manera privada, comprando su propio pasaje a través de la empresa Iberia. “Debemos comenzar a tomar el ejemplo del nuevo Santo Padre en cuanto a la austeridad con la que debemos manejarnos desde la clase política”, señaló en ese sentido el correntino en su cuenta de Twitter.

Los puntanos se anotaron en la vereda opuesta. Los senadores Adolfo Rodríguez Saá y Liliana Negre de Alonso anunciaron que “cumpliendo el pedido de Francisco” decidían no viajar a Roma. La mujer admitió que se moría de ganas por asistir, pero lo vio por TV y junto a su compañero de bancada anticiparon que realizarían una donación a Cáritas de San Luis. Y para no ser menos, el tercer senador de esa provincia, Daniel Pérsico, pese a no figurar en ninguna comitiva de viaje a Roma, decidió donar el importe del pasaje que no compró a Cáritas Diocesana San Luis.