Por ser un hombre cercano al cristinismo, causó “ruido” en el seno oficialismo la opinión del titular del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Horacio Verbitsky, quien discrepó públicamente con la reforma judicial promovida por el Ejecutivo, al menos en lo que hace al límite a las cautelares.

Por eso es que este mismo fin de semana el presidente del bloque oficialista de la Cámara alta, Miguel Angel Pichetto, anunció que el CELS será convocado para este martes, para que expongan sus cuestionamientos al proyecto sobre las cautelares.

La cita es para el día previo al debate del tema en el recinto del Senado, a las 11, ante la Comisión de Justicia.

Puntualmente, Pichetto admitió que ante los comentarios y cuestionamientos del titular del CELS, Horacio Verbitsky, “nos parece importante convocar a los directivos de la entidad para escuchar y analizar todos los aportes que puedan efectuar”.

Según expresó Verbitsky, el proyecto en cuestión “afecta la tutela judicial efectiva de los derechos de los sectores más desposeídos y colisiona contra la Convención Americana de Derechos Humanos, cuyo artículo 25 requiere que las herramientas judiciales disponibles incluyan cautelares y recursos judiciales sencillos para los grupos en situación de vulnerabilidad”.

Pichetto sostuvo que la iniciativa apunta esencialmente “a los grupos económicos y su relación con el Estado para evitar que se frenen decisiones importantes que afecten al conjunto de la sociedad”.

“Los derechos individuales están protegidos en el proyecto como la familia, salud, alimentación y por eso se dejó excluido los plazos provisorios y de tener que pedir al Estado un informe previo para dictar la cautelar”, apuntó el jefe del bloque.