Santacruceña y radical, la diputada nacional Elsa Alvarez reveló que en mayo de 2010 pidió informes al Poder Ejecutivo sobre un crédito hipotecario de 80 millones de pesos que habría otorgado la sucursal Río Gallegos del Banco Nación, a la firma Kank y Costilla SA, vinculada al empresario Lázaro Báez, y jamás nos contestaron.

“Nos llamó poderosamente la atención la facilidad con la que se le dio el dinero, porque se trata de una empresa en la que se han corroborado una serie muy grave de irregularidades, como son la provisión y confección de facturas apócrifas, el vaciamiento de la firma por sus autoridades y la falsificación de firmas de accionistas, todas irregularidades incluidas en el dictamen fiscal que integra la resolución 447 del 2004 del Consejo de la Magistratura”, afirmó la legisladora.

La poca trasparencia y maniobras poco claras es algo que esta legisladora viene denunciando desde el inicio de su mandato, “pero para hacerlo con seriedad, he pedido oficialmente que nos aclaren las dudas, pero el Gobierno no ha contestado los pedidos de informes, lo que nos hace sospechar de algún grado de complicidad entre la empresa y los agentes que intervinieron en el otorgamiento del crédito”, dijo la diputada.

“Si se revisan los malos antecedentes de la empresa es lógica la duda acerca de los motivos que podrían llevar a asignar un crédito de tal cuantía. Asimismo, también resultarían insuficientes las garantías requeridas para avalar el préstamo, pues un documento del Ministerio de Planificación referido a postulantes calificados para realizar obras viales (calificación CUDAP N° S010168841/03 por corredores N° 1-2-3-4-5-6) dice que el patrimonio acreditado por una UTE integrada entre otros por la firma Kank y Costilla SA sumaba a aquella fecha 13 millones de pesos”, remarcó en su momento la legisladora.

“El Poder Ejecutivo Nacional jamás nos dijo si efectivamente se entregó ese crédito, cuáles fueron las condiciones, ni los elementos que intervinieron, ¿hubo análisis de riesgo realizados sobre los solicitantes del préstamo? ¿Se pidió la información correspondiente a la Inspección General de Justicia y a la AFIP, en relación con los antecedentes negativos de la empresa? ¿Se consultó al Ministerio de Planificación acerca de la evolución del patrimonio de la empresa desde la calificación CUDAP anteriormente mencionada?”, continuó.

La diputada radical agregó: “Cabe señalar que, según indica la información periodística, la empresa Kank y Costilla, fue absorbida y es manejada por el empresario Lázaro Báez, sobre quien recaen denuncias de sobrefacturación de obra pública y lavado de dinero”.