Con el objetivo de entregar hectáreas a dos clubes de futbol de la primera división, la Legislatura de la provincia de Buenos Aires volvería sobre sus pasos en una ley que declaró reserva natural a uno de los últimos pulmones verdes que quedan en el Conurbano.
Cuando a fines del año pasado se aprobó la declaración para que la Laguna de Rocha, ubicada en Esteban Echeverría, sea una reserva natural, integral y mixta, tanto ambientalistas como vecinos celebraban el triunfo de una lucha de muchos años.
Sin embargo, pocos meses después se presentó y aprobó en la Cámara de Diputados, una iniciativa del diputado y vicepresidente del Cuerpo José María Ottavis, que desafecta tierras de la mayor reserva natural del Conurbano para que los clubes Racing y Boca Juniors puedan desarrollar allí emprendimientos.
Concretamente, el proyecto de ley al que el oficialismo pretende darle sanción definitiva a la brevedad en el Senado pide disponer de 64 hectáreas de ese pulmón protegido para cederlas a los clubes de fútbol Boca Juniors y Racing.
Esas parcelas ya habían sido cedidas a los clubes en 2009 por la Secretaría General de la Presidencia de la Nación que dictó la Resolución 654, concediendo el uso precario por 20 años prorrogables a 10 más. Posteriormente, en el 2011, se amplió la concesión de la superficie para cada club. Así, aproximadamente 64 hectáreas fueron cedidas, siendo el Estado nacional su titular.
Pero la sanción, el año pasado, de la ley cuyo autor es el titular del bloque de diputados de la CC-ARI, Walter Martello, y que convirtió a la zona reserva natural, obligaba a los clubes a ajustarse a las restricciones de uso que contempla el articulado de la iniciativa y que corresponde a una reserva natural. Ahora, de aprobarse esta modificación, en discusión en la Cámara alta, y apurada por el camporista Santiago Carreras, con la venía de su jefe y titular del alto Cuerpo Gabriel Mariotto, los clubes tendrán vía libre para realizar construcciones en esa zona.
Cabe consignar que el predio llamado Laguna de Rocha tiene una extensión aproximada de 1400 hectáreas de las cuales 300 corresponden a espejos de agua. Abarca nueve ecosistemas distintos, que alojan alrededor de 130 especies de aves, anfibios, reptiles y mamíferos. Desde 1996 es “Reserva Histórica” porque en sus inmediaciones habitaban los indios Querandíes. Es, además, un sitio que rememora al combate de Corpus Christi, primero entre españoles y originarios en este territorio.
En los fundamentos del proyecto presentado por Ottavis se pone como argumento la cesión de hectáreas por parte del Gobierno nacional desarrollada años atrás, y a partir de esto se considera “evidentemente necesaria la modificación de la Ley 14.488 por haberse insertado erróneamente los terrenos cedidos por el Estado nacional al club Boca Juniors y Racing Club”.
El proyecto de los legisladores de la JP-BA, Carreras y Ottavis, salpica en lo político a La Cámpora, la primera de las agrupaciones mencionadas está integrada a la que conduce Máximo Kirchner. Además, en el Senado que conduce Gabriel Mariotto se jactan de buscar cierta empatía con “el pueblo”; en este caso, el pueblo de Esteban Echeverría que se manifestó en contra de la iniciativa por las calles del distrito, bajo la lluvia, el pasado fin de semana, no parece conmoverlo. Y lo que aparece como un argumento de mal gusto es que este proyecto se fundamenta diciendo que fue el deseo del ex presidente de la República, Néstor Kirchner.
La Laguna de Rocha es una barrera natural contra las inundaciones y el último refugio para especies en extinción que ya no se las encuentra ni el litoral argentino y sobreviven en ese humedal en medio del Conurbano bonaerense. La idea de alterar la legislación que protege el predio se asocia a “las ocurrencias de los menemistas en los ’90”, según deslizaron observadores.
En este sentido, el presidente del bloque de senadores del GEN-FAP, Ricardo Vázquez, señaló que un proyecto que “busca retrotraer una ley votada hace cuatro meses por la Legislatura debe ser analizado en la Comisión de Ecología, donde también queremos escuchar la voz de las organizaciones ambientales”.
El legislador por Chascomús agregó que “es insólito que se pretenda un tratamiento exprés de un proyecto, sólo porque de esta manera se obedece raudamente a los intereses del Gobierno nacional, que podría solucionar esta situación cediendo nuevos territorios a los clubes de futbol, sin afectar el medio ambiente”.
Por su parte, según las organizaciones ambientales, “los territorios que se les otorgaron a los clubes son bañados rodeados por pastizal pampeano y grandes extensiones de bosques. Por lo tanto, cualquier actividad que se realice en la zona implicaría la destrucción de forma total del ecosistema”. “Rellenar bañados es un delito ecológico, como así también talar árboles y extraer el pastizal” recuerdan.
A pesar de las resistencias, está descontado que la Legislatura dará sanción al proyecto, privilegiando los intereses de ambos clubes, en uno de los cuales milita el senador Carreras, amparándose en una reglamentación nacional, cediendo parte de la recientemente declarada reserva natural.
