El vicepresidente de la Nación y titular del Senado, Amado Boudou, pidió a la Cámara Federal ser sobreseído su sobreseimiento en el marco de la causa por la venta de la ex Ciccone Calcográfica, al considerar que no está probado su vínculo con el supuesto testaferro Alejandro Vandenbroele.

Además, la defensa del funcionario insistió ante los camaristas Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, que el empresario Raúl Moneta fue quien reclamó como suya a la empresa en cuestión.

En paralelo, el abogado de Boudou, Diego Pirota, pidió al juez Ariel Lijo que la pericia contable ordenada sobre sus bienes y los de todos los imputados en el caso se realice desde 2008 en adelante, por ser cuando él llegó a su primer cargo público, y no desde 1997, como dispuso el juez.

A partir de este pedido, el juez Lijo correrá vista a las demás partes -entre ellos, la fiscalía- para que opinen sobre la solicitud de Boudou y luego resolverá.

Fuente: Noticias Argentinas (NA).