Fuertes críticas disparó el diputado nacional y referente de Fuerza Cívica Riojana Julio Martínez ante los pobladores desalojados de La Banderita. Apeló al “sentido común” del Gobierno provincial en la “extrema situación que atraviesan los vecinos”.

Asimismo denunció que las personas allegadas al gobernador Luis Beder Herrera son beneficiados con grandes extensiones de tierra. “El gobierno provincial no es peronista, es conservador y tiene un ministro represor”, sostuvo.

Luego de su gira por los departamentos Chamical, Facundo Quiroga y Rosario Vera Peñaloza, Martínez se dirigió hacia el corte de ruta que mantienen desde el martes los vecinos del asentamiento la banderita. Dialogó con ellos y culpó al primer mandatario de ordenar el violento desalojo, porque “nada se hace sin el consentimiento del gobernador, él es quien digita todo lo que se hace”, subrayó.

Los manifestantes se mostraron molestos y en algunos casos dijeron continuar “hasta las últimas consecuencias. Estamos dispuestos a todo por defender un techo digno para nuestros hijos”, dijeron. Relataron que funcionarios de primera línea, como el secretario de tierras Ariel Puy “nos prometieron el oro y el moro y nunca cumplieron, cuando fuimos a reclamar se desdijeron de todo”. También le explicaron al legislador que ellos no buscan que les regale nada, sino pagar la tierra para poder construir su vivienda.

Martínez pidió a los vecinos que el reclamo sea de forma pacífica. Aclaró que “van a recibir provocaciones de todo tipo” y apuntó al titular del ejecutivo provincial como el ideólogo “el único objetivo del gobernador es que se enfrenten pobres contra pobres”. Los alentó a no bajar los brazos “porque ya hay muestras de la debilidad del gobierno ante los reclamos populares”.

Ante los vecinos, Martínez, denunció que “en La Rioja la tierra se la quedan los familiares, amigos y funcionarios de Beder Herrera, pero no hay para los más humildes, para los que necesitan de una vivienda digna”. En ese sentido remarcó “son los pobres son los que tienen que salir a ocupar la tierra para poder lograr tener su vivienda. Pero resulta que a diario vemos como en Anguinán, San Nicolás, Vichigasta y gran parte de La Rioja, familiares directos, amigos y funcionarios se quedan con miles de hectáreas para emprendimientos privados”.