Diputados de distintos bloques advirtieron que el kirchnerismo perdió “cuatro millones 800 mil votos en dos años” y consideraron que el resultado de las primarias “es irreversible”.
Diputados nacionales de distintos bloques de la oposición salieron con los tacones de punta a responderle a la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, tras el polémico discurso de este miércoles en Tecnópolis.
“El kirchnerismo perdió cuatro millones 800 mil votos de PASO a PASO, eso no se puede disfrazar con nada”, disparó Carlos Brown (Frente Peronista), luego de la conferencia de prensa en la que anunció junto a otros legisladores el índice de inflación privado.
En la misma sintonía, el macrista Pablo Tonelli precisó que “tres de cada cuatro argentinos votaron una alternativa distinta al Frente para la Victoria”. “Esto es irreversible, la gente quiere un cambio”, analizó.
“La presidenta es mala perdedora, perdió en todos los lugares que pensó que iba a ganar”, opinó Patricia Bullrich (Unión por Todos), al recordar los resultados en provincias como La Rioja, Chubut, Santa Cruz y Neuquén.
Para la diputada, la presidenta “debería haber dicho que acepta la derrota, hacer las modificaciones que hacen falta y tratar de mejorar para octubre”.
En tanto, la macrista Cornelia Schmidt-Liermann defendió el festejo del Pro tras la victoria en la Ciudad de Buenos Aires y destacó que su partido “ha logrado crear nuevos espacios en las provincias, como en Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba, mientras que el kirchnerismo los fue perdiendo”.
Por su parte, el peronista opositor Eduardo Amadeo consideró “un insulto a la política de Derechos Humanos de la humanidad” que la mandataria se refiriera a la victoria oficialista en la comunidad Quom.
El diputado nacional del PS y referente de UNEN Roy Cortina cuestionó el discurso brindado por la presidenta de la Nación en Tecnópolis. Puntualmente sostuvo que “el fanatismo de las palabras presidenciales expresa la miopía de un Gobierno que, en vez de abordar seriamente los graves problemas económicos y sociales que afectan a nuestro país, insiste en negar la realidad”. Y agregó: “Es una burla al conjunto de la ciudadanía que Cristina Fernández hable en contra de la mentira, cuando su gestión ha estado signada por un desconocimiento sistemático de la pobreza, la inflación, la inseguridad, la precariedad laboral y la regresividad tributaria”.
“Nos preocupa que la estrategia oficialista frente a la falta de apoyo ciudadano pase por profundizar la intransigencia, comparar una derrota en las urnas con el golpe del 55 y exprimir la mayoría circunstancial que tienen en el Congreso para imponer la aprobación de un controvertido paquete de leyes”, finalizó el dirigente socialista
