El titular de la AFIP sostuvo que el Gobierno modifica el mínimo no imponible todos los años. Explicó que lo que se dejará de recaudar por Ganancias será paliado con el gravamen a las empresas y un “esfuerzo del Estado” en la gestión del gasto y la recaudación.
Frente a las reiteras críticas del arco opositor, el jefe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, negó que los cambios dispuestos por la Casa Rosada en el Impuesto a las Ganancias sean parte de una estrategia “electoral”.
Así lo aseguró Echegaray ante el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Coparticipación Federal de Impuesto, al que asistió para exponer el proyecto del Poder Ejecutivo que grava las transferencias de títulos y acciones de empresas que no cotizan en Bolsa así como la distribución de dividendos.
Por el contrario, el recaudador sostuvo que la medida es parte de una “política responsable de administración del Estado” y recordó que “el Ejecutivo toma la decisión año tras año de establecer el mínimo no imponible”.
Echegaray indicó que el proyecto para gravar las actividades empresariales surgió de la “mesa de diálogo” entre el Gobierno nacional, el sector industrial, los banqueros y los sindicatos, y a los fines financiar el bache en la recaudación que implicará el aumento del mínimo no imponible.
Precisó que el impacto fiscal será de 4.500 millones de pesos, que el Gobierno espera cubrir de dos maneras.
Por un parte, a través dos nuevos impuestos: entre 670 y 700 millones de pesos se recaudarían una vez que se grave con un 15 por ciento la compraventa de títulos y acciones de empresas que no cotizan en Bolsa; 1.367 millones se obtendrían con el gravamen del 10 por ciento al cobro de dividendos de empresas.
Por otro lado, Echegaray indicó que se esperan paliar los cambios en Ganancias a partir de un mayor “esfuerzo del Estado”: con “mayor eficiencia en al gestión del gasto, en la gestión de la recaudación” y mejorando “el sistema de control sobre los contribuyentes”.
En el marco del debate en el Salón Azul del Congreso, el senador kirchnerista José Mayans (Formosa) agregó que el Estado también se financiará a través del IVA, ya que aseguró que el aumento del mínimo no imponible se traducirá en un aumento del consumo.
Cuando el radicalismo le pidió a Echegaray que explique por qué el Ejecutivo descartó gravar la renta financiera, el jefe de la AFIP contestó en relación a los plazos fijos: “Son ahorros en pesos de los argentinos y el Gobierno nacional no tiene la intención de gravar los ahorros de los argentinos”.
