En otros tiempos seguramente hubiera resultado impensable este tipo de discrepancias, pero el paso de las PASO ha dejado secuelas. Probablemente una muestra sean los pases de factura que se están viendo, algunos de los cuales tienen como destinataria a La Cámpora. Ya se vio al matrimonio Kunkel despotricando contra esa agrupación, cuando hablaron de “carroñeros”. La inquina también involucra a aliados, como ha pasado con el Movimiento Popular Neuquino, donde están indignadísimos por la reacción de La Cámpora por los incidentes registrados frente a la Legislatura de esa provincia, cuando el debate del acuerdo con YPF.

La diputada nacional Olga Guzmán cuestionó las declaraciones del secretario general de la agrupación kirchnerista La Campora, Andrés Larroque, diciendo que le llamó la atención “la irresponsabilidad y ligereza con la que opinan desde el más absoluto desconocimiento”.

“No sé qué le contaron, lo cierto es que un reducido grupo de inadaptados, no el grueso de los manifestantes, llevaron adelante una protesta premeditada dominada por la violencia, el caos y el miedo, con el solo objetivo de abortar la sesión legislativa, y ante esa difícil situación, el operativo policial en un escenario de marcada violencia se abocó a restablecer el orden con un claro protocolo de preservación de los bienes y las personas”, dijo la diputada. Esta historia continuará.