Mientras la Ley de Presupuesto para el año 2014 avanza en el Congreso nacional, el diputado del Pro y presidente de la Comisión de Presupuesto, Hacienda, Administración Financiera y Política Tributaria de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Rogelio Frigerio, confirmó que el proyecto del ejecutivo porteño será presentado el lunes 30 de septiembre durante la reunión de dicha comisión y que utilizará el Índice de Precios que pública la Ciudad.

“Nosotros siempre dijimos que en el momento que tuviéramos terminando nuestros indicadores respecto al índice de precios lo íbamos a usar”, aseguró Frigerio. Y luego agregó: “Lamentablemente en el pasado tuvimos que tomar como verdades los datos macroeconómicos del gobierno nacional aunque todos sabemos que son falsos”.

Entonces, el gobierno porteño ha decidido usar la pauta inflacionaria que él mismo mide y distanciarse del índice de inflación que viene sosteniendo el gobierno nacional por medio del INDEC. Actualmente, el IPC-Ciudad fija la inflación en un 24 por ciento anual mientras que en el proyecto que elevó el kirchnerismo es del 10,4 por ciento.

Durante la medición inflacionaria del mes de agosto, el índice porteño mostró una suba del 2,1 por ciento en los precios pero el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos fijo la inflación de ese mes en 0,8 por ciento.

En referencia al proyecto del gobierno nacional, Frigerio sostuvo que “es el peor presupuesto de todos los que se han venido enviando en todos los últimos años, no sólo por la falsedad de los datos macroeconómicos, cosa a la que estamos acostumbrados, sino por cuestiones adicionales que tienen que ver con la insostenibilidad de querer prorrogar la ley de emergencia económica”.

Por último, aseguró: “Esto lo hacen para manejar recursos por afuera del presupuesto y para prorrogar la no coparticipación del impuesto al cheque cosa que, obviamente, nosotros estamos en desacuerdo”.

Según trascendió, en la ley de leyes de la Ciudad se contemplaría un aumento del impuesto de la tasa de alumbrado, barrido y limpieza (ABL) de entre un 20 o un 40 por ciento dependiendo de la valuación fiscal de cada propiedad.