Mario Ishii, el exintendente de José C. Paz y referente reconocido del conurbano oeste dentro del denominado kirchnerismo -cada vez más insistentemente asociado al peronismo del Siglo XXI-, constituyó una incógnita para los traductores legislativos desde su postulación a una banca del Senado provincial. Estos señores más que nadie saben que el tiempo es tiempo y es rey, y poco a poco la incógnita comienza a despejarse con los pasos dados por quien una vez sostuvo que iba a salir a buscar a los traidores por el conurbano luego de la derrota del 2009.

Sucede que el ahora electo senador provincial ya se apersonó en las lujosas oficinas del Palacio y dio, como no podía ser de otra manera, algunos indicios de sus subrepticias intenciones. En tren de gestión, armó una reunión del presidente de la Cámara alta y vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, con los “senadores nuevos” del FpV-PJ.

No son muchos, en rigor, pero es “una banda”: suman cinco, y es partir de allí es que “el hombre incógnita” pretende erigirse como jefe en búsqueda de espacios de poder. Para muchos de aquellos observadores, bajo el poncho Mario Ishii tendría la intención de ir por la vicepresidencia I que hoy ocupa -es un decir, porque está en uso de licencia- el senador Sergio Berni.