El fiscal José María Campagnoli fue suspendido por presunto “mal desempeño” en una causa en la que investigaba al empresario Lázaro Báez, al cabo de una reunión a puertas cerradas del Tribunal de Enjuiciamiento de la Procuración.

“La suspensión de Campagnoli pone en riesgo otras investigaciones en curso en su Fiscalía”, advirtió al conocerse la noticia la diputada nacional Laura Alonso, en tanto que Julio Cobos expresó su solidaridad con Campagnoli y se preguntó si “esta es la democratización de la justicia de la que nos hablaban”.

El diputado del Frente Renovador Adrián Pérez consideró “muy grave la suspensión de Campagnoli. Y un mensaje al resto de los fiscales para que no se les ocurra investigar la corrupción”.

Desde la Coalición Cívica, en tanto, Fernando Sánchez advirtió que “Gils Carbó pretende destituir a Campagnoli para garantizar la impunidad de CFK y de los empresarios K en los negocios”.

“La suspensión del fiscal Campagnoli es otra señal de impunidad de este gobierno y un mensaje intimidatorio para todos los fiscales: ‘si investigan se irán a sus casas’”, dijo por su parte el diputado Alberto Asseff. Agregó el legislador que “cuando hablamos del necesario ejemplo que desede las alturas del poder se debe dar al llano del pueblo, aquí tenemos uno, negativo claro está”

“Si los gobernantes puede evadir la justicia y suspender a un fiscal cuando sus intereses se ven afectados, ¿cómo asombrarnos si cada día padecemos un horda que causa estragos y aterroriza impunemente?”, se preguntó el legislador.

A su vez, el senador por Proyecto Sur-Unen Fernando “Pino” Solanas calificó la suspensión del fiscal Jose María Campagnoli como “una provocación a la pacificación y la concordia que el país necesita”. Dijo que “es una acción gravísima que pone de relieve la intromisión del Poder Ejecutivo sobre el Poder Judicial y la degradación a la que es sometida la Justicia argentina”.

El senador sostuvo además que “esto es una gran provocación en medio de la mayor crisis social de los últimos años que ya lleva 13 muertos y la destitución de Campagnoli, que fue el único que se animó a investigar la red mafiosa de Lázaro Báez, es como tirar nafta al fuego”.

El consejero de la Magistratura Alejandro Fargosi consideró “gravísima e inconstitucional la suspensión del fiscal Campagnoli” y aseguró que “como era previsible, este gobierno no piensa cambiar nada y seguirá tratando de dominar al sistema judicial. Ahora quiere escarmentar a los buenos fiscales a través de Campagnoli, suspendido injustamente y en audiencia secreta”. Agregó Fargosi que “exigí dos veces y por escrito, intervenir como amicus curiae y que la audiencia donde se decidiría la suspensión fuese pública. Pero no hubo caso: al kirchnerismo no le importan las garantías republicanas y mucho menos la independencia de la Justicia. Contra lo que pensaban los representantes del Colegio Público de Abogados, de la Federación de Colegios de Abogados y de la Corte Suprema, suspendieron arbitrariamente a Campagnoli. Porque nada es peor para el kirchnerismo que un fiscal que los investigue en serio y un juez que los juzgue imparcialmente”.

El consejo evaluador votó finalmente por cuatro a tres en favor del pedido de la procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, para que se suspenda a Campagnoli a fin de iniciarle un juicio político, por presunto “mal desempeño” en una causa en la que apuntó al empresario Lázaro Báez.

El fiscal anticipó que “va a recurrir a todas las instancias que sean necesarias” para defender lo que considera “el trabajo de un fiscal” y afirmó que su actuación en el expediente por lavado de dinero “molestó por tocar a empresarios vinculados al poder”.