La jefa de los diputados kirchneristas salió al cruce de De Mendiguren, que pidió postergar las paritarias, y de Felipe Solá, quien dijo que la gente podría estar dispuesta a que le bajen el salario.
La presidenta del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados, Juliana Di Tullio, aseguró que con las declaraciones de los diputados del Frente Renovador, José Ignacio De Mendiguren, quien pidió postergar las paritarias, y de Felipe Sola, quien aseguró que la gente podría estar dispuesta a que le bajen el salario, “el massismo comienza a mostrar lo que es”.
“Empezaron a mostrar lo que son”, aseguró Di Tullio al referirse al Frente Renovador conducido por el diputado nacional Sergio Massa.
“De Mendiguren pide que las paritarias, que son un logro de estos casi once años de gobierno, se frenen y Solá pide una rebaja del salario del 10 por ciento”, explicó y reiteró: “Muestran lo que son y es lo que quieren”.
En diálogo con Radio Nacional, la diputada advirtió que en esta línea de buscar un “ajuste”, desde el massismo ya “presentaron un proyecto el año pasado de metas de inflación, que las conciben como eso: eliminación de paritarias y enfriamiento de la economía”.
En este sentido, la legisladora remarcó que desde el Frente para la Victoria “creemos todo lo contrario” y agregó que “parte de los pilares fundamentales de nuestro gobierno es por supuesto la política de ingresos, salarial y de precios”.
“Lo decía la presidenta en su último discurso cuando inauguraba el programa Progresar. Le decía a los comerciantes ´bueno miren ellos van a consumir, hay que cuidar a la gallina de los huevos de oro´, y la gallina de los huevos de oro son los trabajadores, son los consumidores”, resaltó.
En este marco, la diputada destacó: “Hemos hecho más de 1.500 paritarias en estos 11 años. Nosotros vamos a cuidar a los trabajadores, de ninguna manera vamos a dejar que alguna presión política” lo cambie, señaló.
Finalmente, Di Tullio se refirió a las declaraciones del diputado massista Felipe Solá, quien afirmó que “la gente a lo mejor está dispuesta a que le bajen un poco el salario”.
“¿Eso es una amenaza, no?”, se preguntó la legisladora y aseguró que “la gente no está canchera, la población está madura y sabe perfectamente lo que no está dispuesta a perder. De ninguna manera está dispuesta a perder su capacidad de compra, su capacidad de trabajo, de ahorro, de ascender socialmente”.
“No creo que el pueblo en el que yo confío, aunque perdamos elecciones, esté dispuesto a perder”, concluyó.
