Tras el discurso de la presidenta en la Asamblea Legislativa, la diputada nacional por la UCR de Córdoba Soledad Carrizo manifestó que “las democracias se defienden con diálogo, con sincera autocritica, la que implique reconocimiento de virtudes y errores. Este es el espíritu y la convicción que ha orientado mi vida política y después de escuchar el discurso de la presidenta, tengo la triste sensación de estar viviendo en un país diferente, que no es justamente el que me cuentan este relato oficial”.

Carrizo reconoció el tono “casi conciliador” de la presidenta, #pero evidentemente para pedir acompañamiento y respeto hay que empezar por mostrar uno mismo esos gestos y lamentablemente sigo sin encontrar esa actitud en la conducción de este país”.

En referencia a los tramos más importantes del discurso presidencial, Carrizo puso énfasis en señalar que se trato de una mirada hacia el pasado, “comparar la actualidad de nuestro país con lo que sucedía allá por el 2002 o 2003 es a las claras una mirada distorsionada de la realidad. No podemos hablar de una economía en crecimiento cuando desde hace al menos tres meses estamos en caída libre”.

“Fue un discurso extenso y evidentemente es difícil poder evaluarlo en su totalidad, pero sinceramente esperaba alguna mención o referencia a temas con los que convivimos cotidianamente los argentinos”. En este sentido, pareciera que en este país no hay inflación porque nada se dijo al respecto”. Tampoco habló de corrupción, de inseguridad, y narcotráfico, remarcó, “como si fuesen variables de las que estamos exentos en este país”. Valoró sí el pedido de concertación, de organizarse como sociedad y el llamamiento al respeto por los ciudadanos, aunque en este sentido, “el ejemplo comienza por casa”, concluyó Carrizo.

La senadora Laura Montero (Mendoza) sostuvo que “nos hubiera gustado que la presidente hablara de la Argentina real” y agregó que “no reconoce los problemas de la gente como inseguridad e inflación”. Sostuvo la legisladora nacional que “hablar del 2003 es como compararse con el diablo, somos todos más buenos de seguro. Insisto, a veces hay dichos de la presidente que insultan la inteligencia de los ciudadanos argentinos”.

Por su parte, el diputado Miguel Giubergia dijo que “la presidente prefiere omitir antes que admitir por eso, otra vez, se salteó los datos de la realidad”. El secretario general del bloque radical dijo que “no se puede continuar desconociendo el flagelo del narcotráfico”, ni tampoco “seguir escondiendo las tragedias de Once y de Castelar”.

“La presidente relató una realidad que no se ajusta a lo que vivimos los argentinos. Cristina Kirchner no abordó ni uno de temas que preocupa a la sociedad. Esperábamos que se refiera al paliativo que tienen pensado para frenar la inflación”, dijo por su parte el diputado Gustavo Valdés (Corrientes). “De nuevo le faltó el respeto al pueblo, mintiendo y contando una realidad que sólo ellos viven en su relato”, amplió Patricia De Ferrari (Córdoba).

Por su parte, el senador radical Eugenio “Nito” Artaza, consideró que “la buena noticia es que en el aspecto humano y lo debemos destacar que se la vio muy bien de salud a la presidenta, muy lúcida y la saludé cuando terminó su discurso”. En diálogo con parlamentario.com, dijo que “la presidenta hizo una reseña a través de estadísticas pero faltó una agenda parlamentaria mas clara para el año. Salvo la mención de los códigos Penal y algunos proyectos sobre convivencia que habló de enviar al Parlamento, pero me parece que falto una agenda sobre temas que hace a los sectores más vulnerables después de la inflación y la devaluación”.

“Tampoco hizo mención al tema del narcotráfico que al igual que la inflación son dos temas que preocupan a toda la sociedad a todos los argentinos”, puntualizó.

“Hay una evasión de la realidad por parte de la presidenta que preocupa”, dijo a su turno el diputado Manuel Garrido, para quien Cristina “habló de un país que no existe. No mencionó los problemas más importantes que vivimos en este momento como país: la inflación, la inseguridad, crimen organizado y la corrupción”. El legislador se mostró sorprendido porque la presidenta “no hiciera anuncios ni le pidiera al Congreso leyes fundamentales que están haciendo falta sobre todo en materia de transparencia, funcionamiento de la justicia y medidas anticorrupción”.

“La presidenta abrumó con datos, muchos de ellos basados en las cifras engañosas que dejó el INDEC, para evitar hablar del último año de gestión, de lo que piensa hacer en este año y qué espera del Congreso”, señaló Garrido, quien sostuvo que “la agenda que planteó sobre justicia es paupérrima, luego del fracaso de sus pésimas reformas del año pasado. No se hace cargo de que muchos de los nombramientos de jueces están pendientes en el propio Poder Ejecutivo y dice que los jueces no deben ser partidarios, cuando hasta el momento todas las listas de conjueces que ha enviado al Senado incluye a amigos del poder”.

Por último, Garrido señaló que “hacía falta que mencionara la situación del vicepresidente Boudou ante el cerco de denuncias que se va cerrando alrededor de él y lo implican cada vez más en hechos graves de corrupción”.

El diputado Enrique Vaquié (Mendoza) sostuvo que “desde Presidencia de la Nación nos entregaron un informe con la Memoria Detallada del Estado de la Nación 2013, lleno de falacias y olvidos”. Citó por ejemplo que “el Ministerio de Economía no habla de inflación, ni de la pérdida de reservas ni del cepo cambiario, como si negarlos hiciera que los problemas desaparecieran. También se afirma que la Secretaría de Comercio ‘tomó medidas para evitar la suba de precios’, no figura cómo evalúan los resultados de esas medidas”.

Vaquié se refirió a los índices de crecimiento del Banco Central que mencionó Cristina Fernández: “Para que crezca el BCRA, subió las tasas de interés a las pymes argentinas. ¿Conocerá la presidenta la tasa que se paga por un descubierto bancario? Cuando se habla del saqueo al bolsillo de los argentinos está bien que se mencione la existencia de empresarios inescrupulosos pero hay que señalar que el principal culpable es la política económica de este Gobierno”.

Por su parte, el diputado nacional Mario Fiad (Jujuy) señaló que “la circunstancia de que el recinto estuviera copado por publico oficialista es una evidente falta de respeto al pueblo que se encuentra representado en cada uno de los diputados de la oposición”.

Fiad señaló que el discurso pronunciado en la ocasión por la presidente “no cambia con relación a los que vino realizando en los últimos años, señalando las supuestas bondades del modelo, traducidas en números que después no se encuentran en ningún lado, porque además no hay posibilidades de acceso a la información pública y que se contrastan claramente con la realidad y que además siempre se referencian al 2003 y no a su propia gestión”.

Remarcó su “profunda preocupación” por “la escasa referencia a las adicciones a través de su mención a la SEDRONAR. El tema de las adicciones requiere de una política pública estratégica que ameritaba un párrafo especial y prioritario en el discurso”.

Añadió que la presidente hizo una “absoluta omisión del problema del narcotráfico”, lo cual “refuerza la percepción generalizada de la falta de una voluntad política para luchar contra el narcotráfico”.