El diputado y economista del oficialismo afirmó que “hay una gran necesidad de conformar una coalición empresarial-sindical que defienda lo obtenido durante todos estos años”.
El diputado nacional Roberto Feletti vaticinó que “este año vamos a tener un segundo semestre mucho más cómodo” en el plano económico y afirmó que “hay una gran necesidad de conformar una coalición empresarial-sindical que defienda lo obtenido durante todos estos años”.
Además, el economista reconoció que tras 11 años de gobiernos kirchneristas existen “tensiones”, aunque “en el marco de un país que está desendeudado, con bajo desempleo y con un mercado interno robusto”.
El legislador del Frente para la Victoria expuso en la inauguración de un nuevo ciclo de la Escuela de Formación y Capacitación Política del Partido Justicialista de la ciudad bonaerense de Chacabuco, donde trazó un panorama económico sobre el segundo mandato de la presidenta Cristina Kirchner y planteó algunos desafíos de cara al futuro inmediato.
En ese sentido, destacó que “todos estamos orgullosos de la política de desendeudamiento implementada por este Gobierno” y aseguró que la misma representa “un activo muy importante para nuestra Nación, porque nos permitió ganar soberanía”. Sobre el particular, recordó que “el Gobierno se hizo cargo de un default que no produjo y reestructuró el 93 por ciento de la deuda heredada, haciéndolo además con una quita importante”.
En relación al proceso que desembocó en la devaluación de enero, Feletti indicó que fue “la primera vez que, frente a una restricción del sector externo, (el Gobierno de Cristina) no le hizo pagar las consecuencias al pueblo en términos de salario y empleo”. Comparó este manejo con lo que sucedió en las administraciones anteriores a 2003, “donde siempre que en la Argentina faltaban dólares, pagaba la gente”, como sucedió durante la crisis de 2001/2002, cuando pudimos ver “una país endeudado, fuga de capitales, caída de reservas y megadevaluación”.
El exviceministro de Economía de la Nación explicó que este logro fue posible “gracias a las reservas internacionales que veníamos acumulando desde 2003 en el Banco Central, que nos dieron la espalda suficiente para dar esa batalla”. Gracias a esa medida de política económica, agregó, “el país siguió creciendo, el desempleo siguió bajando y la producción siguió funcionando”, lo que demuestra que “la restricción externa no detuvo el funcionamiento económico del país”, sino que, por el contrario, “el uso de las reservas para autofinanciarnos nos dio mayor autonomía y permitió este escenario”.
En base a todo lo anterior, Feletti evaluó que entre 2012 y 2013 “el Gobierno dio una larga pelea de dos años por enfrentar la restricción externa y sostener el modelo funcionando” y aseguró que en esa pelea “tuvo éxito”.
Lo que vendrá
En cuanto al escenario actual, Feletti aseveró que luego de dos años de implementar una política de autofinanciamiento, ahora “el Gobierno busca un nuevo piso de competitividad”, para lo cual “empieza a corregir precios relativos, modifica el tipo de cambio e intenta regularizar su frente externo”.
El diputado porteño evaluó que “este esquema de mayor competitividad va a generar un escenario de crecimiento distinto”. Al respecto, manifestó que el mismo se va a lograr gracias a “la solidez de las reservas del Banco Central que va a generar este nuevo tipo de cambio”, a lo que añadió que “el Gobierno terminará de resolver pautas pendientes del default y probablemente genere un flujo importante de inversiones en favor de Vaca Muerta”.
Todo esto le permitió vaticinar que “este año vamos a tener un segundo semestre mucho más cómodo”.
Sobre el cierre de su exposición, Feletti celebró que “vamos a cumplir once años de Gobierno”, razón por la cual “es lógico que estemos experimentando algunas tensiones”, pero remarcó como un hecho positivo que las mismas “se dan en el marco de un país que está desendeudado, con bajo desempleo y con un mercado interno robusto”.
Finalmente, evaluó que “hay una gran necesidad de conformar una coalición empresarial-sindical que defienda lo obtenido durante todos estos años”. Específicamente, llamó a proteger “el Estado de bienestar que hemos conseguido; que el mismo se haya financiado sin deuda; la inserción internacional de la Argentina; la capacidad de vender industria; la discusión sobre la energía; y el desarrollo que puede suponer nuestros yacimientos no convencionales”.
