Resaltó el aporte del santo padre desde su “gestualidad”, por haber recibido en las últimas semanas a la presidenta, a veteranos de Malvinas y a Daniel Filmus.
El titular de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Guillermo Carmona, destacó que el papa Francisco le haya preguntado al secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, “por el estado de situación” del archipiélago, pocas jornadas antes de que el jefe de la Iglesia Católica reciba a la reina Isabel II de Inglaterra, en el Vaticano.
“El papa Francisco preguntó por el estado de situación de Malvinas planteando la importancia del diálogo. Y ya no como argentino, sino como una figura universal”, señaló el diputado Carmona, al conmemorarse 32 años del inicio de la Guerra de Malvinas.
Según el legislador mendocino, “las cuestiones de América latina y de la Argentina, en particular, están muy presentes en los actos de Francisco y en su agenda. No es casualidad que esté presente el tema de Malvinas en las preocupaciones del papa”.
“Creo que es mucho lo que el papa Francisco está aportando desde su gestualidad”, interpretó el diputado kirchnerista, luego de recordar que en la última quincena recibiera a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, a los veteranos de Malvinas y al secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas.
Para el legislador cuyano, “la cuestión Malvinas es un tema de la agenda global y el Papa ha tenido gestos que denotan la incorporación a su propia agenda”.
Apoyada en la resolución 2065, de 1965, de las Naciones Unidas y en los sucesivos pronunciamientos del Comité de Descolonización del organismo internacional, que invitan a dialogar sobre la cuestión de la soberanía de las Islas Malvinas, la Argentina viene construyendo escenarios nacionales e internacionales en favor del inicio de la plática.
“Uno de los logros en la construcción es haber logrado que Malvinas sea una causa regional, otro punto positivo es el consenso logrado en el Congreso con la Declaración de Ushuaia, que define por primera vez la posición parlamentaria respecto del tema. La declaración fue aprobada por unanimidad en el Congreso”, subrayó Carmona.
Otro aspecto positivo de esta estrategia tiene que ver con que el tema está presente en distintos ámbitos donde se genera opinión global.
“El canciller Héctor Timerman, en febrero de 2013, estuvo en el parlamento británico. En mi caso -puntualizó el diputado- estuve tres veces reunido con parlamentarios británicos. El año pasado, recibimos a una delegación de parlamentarios británicos en el Congreso”.
“En todos los casos, estuvo en un lugar central la cuestión Malvinas. Hemos planteado la necesidad de dialogar. Los británicos se han negado en forma oficial, pero no eludieron el diálogo informal. Esto sirve para crear condiciones”, argumentó.
Carmona sostuvo que hay que dar continuidad al planteo, porque “tarde o temprano, va a rendir frutos. Porque el Reino Unido va a evaluar si postergar el resto de la agenda que pretende desarrollar con la Argentina, vale la pena para sostener la posición de no diálogo por Malvinas”.
En materia comercial, Carmona señaló que “las empresas británicas que tienen actividad exploratoria petrolera en las aguas circundantes a Malvinas, están vedadas de operar en el país. Estas empresas tienen restricciones administrativas y hasta penales”.
“La restricción a operar no afecta sólo a la exploración en las aguas del mar argentino, sino que afecta, además, a la infraestructura hidrocarburífera de Malvinas con apoyo continental”, concluyó.
