El diputado Valdés, vicepresidente de la Comisión de Seguridad Interior, repudió los “linchamientos” y los adjudicó a la “inacción” de la Casa Rosada. Relacionó la “crisis de seguridad” a la concentración de recursos por parte de la Nación.
Como respuesta los denominados “linchamientos” a delincuentes, el vicepresidente de la Comisión de Seguridad Interior de la Cámara de Diputados, Gustavo Valdés (UCR-Corrientes), anticipó que prepara en un proyecto de ley para declarar la emergencia nacional en seguridad pública, tal como lo hizo el gobernador Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires. “Nación tuvo 10 años de inacción en materia de políticas de seguridad”, denunció Valdés. Y aseguró que los denominados “linchamientos” son el resultado de la “inacción del Gobierno kirchnerista para abordar y resolver un pedido que la sociedad viene haciendo desde hace tiempo”.
No obstante, opinó que “no se puede hacer justicia por mano propia, a partir de la injusticia” y “el que mata es tan delincuente como el que roba; ambos son delitos”.
“El Estado de derecho no puede permitir nunca hacer justicia con la injusticia. Por ello no se puede avalar el linchamiento. Es un retroceso a más de 3.000 años cuando los hombres apedreaban hasta la muerte a quienes faltaban a los códigos de convivencia. Es verdad que cuando uno es víctima de un robo da bronca, pero el compromiso debe ser de todos de exigir y construir a una sociedad en la que las instituciones funcionen”, expresó Valdés, que durante cuatro años fue ministro de Gobierno de Corrientes.
“En este momento la sociedad tocó fondo porque quienes deben dar respuesta no pueden hacerlo. A la gente le indigna que la policía detengan a los delincuentes, y estos sean sueltos en un abrir y cerrar de ojos. Distintos estudios en materia de seguridad dan cuenta que en Argentina solo tienen condena el cuatro por ciento de los delincuentes que son aprendidos. El resto de los procesos se caen”, señaló el diputado.
El legislador correntino, asimismo, indicó que la “crisis de la seguridad” está relacionada con la concentración de recursos que hizo la administración Central de la coparticipación que se reparte a las provincias.
“Las provincias reciben, hoy, solo el 25 por ciento de los fondos que recauda la Nación. Cuando se inició la democracia en 1983, Nación destinaba a las provincias el 55 por ciento de los recursos, y había escuelas nacionales y hospitales nacionales. Todo esto paso a manos de las provincias y encima le recortaron el porcentaje de recursos. Esto llevó a que se ajuste en materia de seguridad y el sector quede sin posibilidades de recibir inversiones. Obviamente la prioridad de los gobiernos provinciales fue puesta en la salud y la educación. Entonces tenemos una administración central que navega en la opulencia y las provincias cada vez con menos recursos para abordar esta clase de problemática legadas”, dijo Valdés.
En ese sentido el legislador radical recordó el conflicto policía de finales del año pasado cuando las policías provinciales se alzaron reclamando mejoras salariales, lo que generó una ola de saqueos en distintos puntos del país.
“Después de los levantamientos de las policías, fueron las provincias las que tuvieron que salir a afrontar y atender los reclamos salariales de las policías y una vez más Nación miró para otro lado. No les dio apoyo alguno a las provincias para que recompongan los salarios policiales, siendo que la situación era realmente delicada”, explicó.
