El diputado nacional del Frente para la Victoria por la Ciudad de Buenos Aires se refirió a la situación que atraviesa el sector energético nacional y destacó las perspectivas positivas que se abren tras la recuperación por parte del Estado del 51% de las acciones de YPF.
Roberto Feletti fue el orador que cerró el plenario de las comisiones de Energía y de Presupuesto y Hacienda, donde se aprobó el proyecto de ley que establece el Convenio de Solución Amigable y Avenimiento de Expropiación entre la Argentina y Repsol y que será tratado en la Cámara baja el próximo 23 de abril.
Durante su exposición, el legislador agradeció la presencia del ministro de Economía y Finanzas Públicas de la Nación, Axel Kicillof; del secretario Legal y Técnico de la Presidencia de la Nación, Carlos Zannini; y del CEO de YPF, Miguel Gallucio, “que ayer estuvieron seis horas trabajando en este plenario, explicando pormenorizadamente todos y cada uno de los detalles del acuerdo tanto en lo jurídico como en lo relativo a la tasación y a los aspectos económicos”. En la misma línea, también celebró la presencia de los expositores invitados por la oposición, “con quienes no coincido en la mayoría de los planteos, pese a lo cual es valioso su testimonio”.
En cuanto al desempeño de los representantes de los partidos opositores en el debate, el diputado lamentó “que no se refuercen las instituciones y que el Congreso de la Nación deje de ser el ámbito del debate real en beneficio de los estudios televisivos y las cámaras”.
En su opinión, “nos perdimos la oportunidad de debatir el futuro”, ya que “se plantearon numerosas discusiones sobre aspectos marginales del acuerdo con Repsol, pero nadie introdujo la cuestión que todos esperábamos y que hubiese generado un debate rico: saber si este acuerdo abre un flujo de inversiones hacia YPF que permita aumentar la producción de petróleo y gas”.
En ese sentido, agregó que “para las fuerzas políticas que legítimamente aspiran a gobernar el país después del 10 de diciembre de 2015, esta debería haber sido una preocupación central”, pese a lo cual “ningún representante de la oposición planteó una discusión sobre este tema, que es el gran desafío que tenemos a futuro”.
En el marco de esta discusión, Feletti enfatizó que en el actual escenario económico mundial, “la energía se vuelve una llave de competitividad”, añadiendo que “si la Argentina quiere ser un país industrial y no pretende serlo en base a sus salarios, sin mano de obra barata, entonces requiere necesariamente energía a costos accesibles”.
Sobre el particular, explicó que “los Estados Unidos aparecen mejor posicionados en la salida de la crisis internacional, precisamente por el petróleo no convencional que les permite levantar la competitividad de su economía”, mientras que “otra potencia como los es Alemania, aparece con debilidades de competitividad, también a causa del problema energético”. Por lo tanto, es en ese marco que “el petróleo no convencional se vuelve una llave para el desarrollo y el crecimiento de la Argentina”.
En igual dirección, el exviceministro de Economía indicó que “lo que deberíamos haber debatido es a qué modelo de industria aspiramos, si este acuerdo viabiliza el futuro de la Argentina en términos de un flujo de inversiones y si realmente podemos ser competitivos ante los desafíos que se nos plantean en el futuro”.
De cara al debate en el recinto de la Cámara baja, llamó a los diputados opositores a “debatir el futuro” y les pidió que “no se queden en ver si logran poner sus nombres en letras de molde en una carátula ante la Justicia y después en un diario”, ya que “buena parte del destino de la Argentina como Nación se juega en su capacidad de obtener energía barata que garantice un modelo industrial y el bienestar de su población”.
El dictamen de mayoría contó con la firma de 30 diputados, entre representantes del Frente Para la Victoria y aliados como el Movimiento Solidario Popular, el Frente Cívico por Santiago y Nuevo Encuentro.
